La educación y la formación no sólo son la principal política nacional, sino que también determinan el futuro de la nación, en el que los docentes son el centro de esa política nacional.
LOS PROFESORES ASUMEN MUCHAS FUNCIONES NUEVAS
La Ley del Profesorado establece claramente por primera vez la condición jurídica, los derechos y las responsabilidades profesionales, contribuyendo a reposicionar el papel del profesorado en el sistema educativo. El profesorado ya no es simplemente transmisor de conocimientos, sino un factor central que lidera la transformación digital, innova en métodos y crea un entorno de aprendizaje humano y moderno.

Los docentes merecen ser tratados de manera justa, respetados y capacitados para mantenerse firmes en su profesión.
FOTO: DAO NGOC THACH
En el contexto de la revolución industrial 4.0 y la inteligencia artificial (IA), el profesorado debe asumir numerosas funciones nuevas: diseñar actividades de aprendizaje, impulsar el pensamiento crítico, analizar datos de aprendizaje, brindar apoyo psicológico, formación de habilidades y orientación profesional al alumnado. Según el Secretario General To Lam, el profesorado también es científico. La Resolución n.º 71 del Politburó también hace hincapié en "mejorar el estatus, el rol, los ingresos y garantizar las condiciones laborales del profesorado", un requisito indispensable para garantizar la calidad de la educación en la nueva era.
Estas exigencias exigen que los docentes aprendan continuamente a adaptarse e innovar. Un docente moderno es un experto en la materia, un pedagogo tecnológico, un psicólogo escolar, un gestor de aula y una inspiración que acompaña a los estudiantes en la creación del futuro. Esto no solo representa una ampliación de funciones, sino también un testimonio de la necesidad de un nuevo estatus para la profesión docente, acorde con las responsabilidades que asume en la era digital.
EL SALARIO DE LOS DOCENTES DEBE SER PROPORCIONAL
La calidad de la educación depende directamente de la calidad del profesorado. Muchos países consideran que garantizar unos ingresos adecuados es una inversión estratégica. Corea del Sur, Japón y Singapur pagan a los profesores salarios iguales o superiores a los de otras profesiones de nivel similar para atraer y retener recursos humanos de alta calidad.
En Vietnam, si bien los ingresos de los docentes han mejorado, aún no se corresponden con la intensidad de su trabajo y sus responsabilidades profesionales. Los docentes de preescolar, primaria y de bajos recursos son los más desfavorecidos. Trabajan horas extra, soportan la presión de evaluar a los alumnos, gestionar expedientes, coordinarse con los padres y deben estudiar y mejorar continuamente para cumplir con los requisitos de la innovación.
Según el Ministerio de Educación y Formación, solo alrededor del 12% del profesorado se clasifica en los tres grupos salariales altos: A1, A2.1 y A3.1, mientras que casi todos los funcionarios de otros sectores se encuentran en el grupo equivalente. Este es un problema de larga data, que refleja que la profesión docente no ha recibido el trato adecuado según la postura establecida por el Partido y el Estado.

La Ley de Maestros y la Resolución 71 del Buró Político afirman que colocar el salario de los docentes en el grupo más alto del sector administrativo y de carrera es una exigencia urgente.
FOTO: NHAT THINH
La diferencia también se evidencia en el límite del coeficiente salarial: el profesorado tiene un máximo de 6,78, mientras que muchos otros funcionarios pueden alcanzar 8,00. Esto dificulta que el profesorado alcance el nivel salarial más alto a pesar del aumento de la carga de trabajo, las exigencias profesionales y la presión laboral.
Para superar esta situación, el Ministerio de Educación y Formación propuso un coeficiente salarial especial: 1,25 para docentes de preescolar y 1,15 para docentes de educación general. De aprobarse, el salario máximo podría rondar los 19 millones de VND mensuales, sin incluir dietas, en consonancia con la Resolución 71.
La Ley del Profesorado y la Resolución 71 también afirman que es urgente que los salarios docentes se sitúen entre los más altos del sector administrativo. Un ingreso digno no solo atrae a personas con talento y evita que abandonen la profesión, sino que también motiva a los docentes a innovar con ahínco y a mejorar la calidad de los recursos humanos nacionales.
N SEÑALES POSITIVAS DE LAS NUEVAS POLÍTICAS
Junto con la reforma salarial, las nuevas políticas del Partido, el Estado y el Ministerio de Educación y Formación abren nuevas puertas al profesorado. Ajustar los estándares profesionales de forma práctica ayuda a reducir la formalidad y a aumentar el valor profesional. La transformación digital en la gestión educativa reduce significativamente la carga documental, facilitando que los docentes dediquen tiempo a la docencia y la investigación.
Muchas localidades implementan subsidios específicos según la región, la escasez de asignaturas y el apoyo para vivienda y transporte del profesorado en zonas remotas. Esta es una solución para retener al profesorado, especialmente en zonas con escasez de personal docente.

En el contexto de la revolución industrial 4.0 y la IA, los docentes deben asumir muchas funciones nuevas.
FOTO: NHAT THINH
La política de fomentar la autonomía profesional mediante programas de educación abierta también genera cambios positivos. Cuando los docentes tienen la autonomía para diseñar clases adaptadas a sus estudiantes, tienen la oportunidad de desarrollar su creatividad y desarrollar sus carreras. Ampliar las oportunidades de aprendizaje y formación a través de plataformas digitales facilita el acceso a nuevos conocimientos de forma cómoda, ahorra tiempo y mejora la calidad de la enseñanza según los estándares internacionales.
DE LA POLÍTICA AL RESPETO REAL
Mejorar la situación del profesorado es una tarea integral. Los salarios son clave, pero no podemos depender únicamente de aumentos salariales para cambiarla. La sociedad necesita cambiar la forma en que percibimos, asignamos tareas y evaluamos al profesorado.
En el seminario científico "La Universidad Pedagógica de Saigón antes de 1975", organizado por la Universidad de Educación de Ciudad Ho Chi Minh en octubre de 2023, el profesor asociado Dr. Vo Van Loc, profesor titular de la Universidad de Saigón y exalumno de la misma entre 1972 y 1975, afirmó que los estudiantes de pedagogía no solo son el orgullo de sí mismos, sino también de sus familias y clanes. Este orgullo se debe a tres factores importantes: primero, solo los candidatos excelentes son admitidos en la escuela, con una tasa de aprobación de entre el 10% y el 15% del total de candidatos; segundo, tras la graduación, los estudiantes obtienen inmediatamente el título de "profesores de secundaria"; y tercero, los docentes disfrutaban del salario más alto en ese momento, con un índice de 470, mientras que otros sectores tenían un índice de 430. Estos tres factores generaron un fuerte atractivo, atrayendo a personas con talento a la pedagogía y contribuyendo a afirmar la noble posición de la profesión docente en la sociedad.
Por lo tanto, reducir la presión innecesaria es el primer paso. Los docentes no pueden asumir toda la responsabilidad de la educación si la familia y la sociedad no participan. Los padres deben comprender las limitaciones de los docentes, evitar establecer expectativas poco realistas y colaborar con ellos en la educación de sus hijos. El entorno laboral debe respetar la experiencia, evaluar con transparencia, promover con claridad y reconocer de forma práctica a las personas con talento.
Una sociedad civilizada sabe cómo proteger a los docentes, brindándoles autonomía, confianza y condiciones de ingresos elevados para desarrollar sus capacidades. Cuando los docentes se sienten verdaderamente respetados, su estatus profesional se consolida de forma sostenible, contribuyendo directamente a la calidad de la educación y al desarrollo social.
Mejorar el rol, la posición y la vida del profesorado no es solo responsabilidad del sector educativo, sino también de toda la sociedad. El profesorado determina la calidad de los recursos humanos, la base de todas las estrategias nacionales de desarrollo.
Un sistema educativo vietnamita sólido, que se encuentre entre los 20 mejores del mundo para 2045, según lo establecido en la Resolución 71 del Politburó, será una realidad cuando los docentes estén protegidos por las políticas, sean respetados en su profesión y dotados de experiencia real. Entonces, podrán centrarse plenamente en la creatividad, la innovación metodológica y la dirección de los estudiantes en un mundo en constante cambio.
Si los ingresos, las prestaciones y las condiciones laborales no mejoran, los docentes seguirán abandonando la profesión, la calidad de la educación se deteriorará y el objetivo de la reforma quedará lejos. Invertir en el profesorado es invertir en el futuro. Un país no puede ser fuerte si el profesorado es débil; no puede prosperar si faltan quienes siembran las semillas del conocimiento. Los docentes merecen un trato justo, respeto y empoderamiento para mantenerse firmes en su profesión: la base de una educación de calidad, una sociedad civilizada y un desarrollo nacional sostenible.
Fuente: https://thanhnien.vn/vi-the-moi-cho-nha-giao-185251119231833976.htm






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