"Azerbaiyán ha iniciado operaciones militares a gran escala contra la población pacífica de Nagorno-Karabaj", escribió el embajador en misión especial de Armenia, Edmon Marukyan, en la red social X (el nuevo nombre de Twitter). Ahora es el turno de Estados Unidos de considerar medidas para detener las acciones de Azerbaiyán para proteger a los civiles que sufren en la región.
El diplomático armenio pidió al presidente estadounidense Joe Biden, al presidente francés Emmanuel Macron y a los líderes de la Unión Europea (UE) que condenen conjuntamente las acciones de Bakú.
Ataque azerbaiyano en Nagorno-Karabaj el 19 de septiembre de 2023. Foto: Ministerio de Defensa de Azerbaiyán.
El llamamiento de Edmon Marukyan se produjo en el contexto del anuncio del ejército azerbaiyano, el 19 de septiembre, del lanzamiento de una "operación antiterrorista" en la región separatista de Nagorno-Karabaj. La medida se produce después de que Azerbaiyán dijera que seis de sus ciudadanos murieron por minas terrestres en dos incidentes separados, culpando a “grupos armados ilegales armenios”.
La CNN citó a funcionarios armenios diciendo que los ataques con artillería, misiles y drones de Azerbaiyán en Nagorno-Karabaj mataron al menos a cinco personas, incluido un niño, e hirieron a otras 80.
El Ministerio de Defensa de Azerbaiyán exigió el 19 de septiembre "la retirada completa de las tropas armenias de la zona". En respuesta, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Armenia confirmó que sus tropas todavía están estacionadas en Nagorno-Karabaj.
Al comentar el pedido de "intervención estadounidense" del embajador en misión especial de Armenia, Edmon Marukyan, Rusia exigió que todas las partes respeten el acuerdo de alto el fuego de 2020.
"No debe haber vuelta atrás", dijo el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, citado por RT . “Deben realizarse esfuerzos concretos basados en el marco legal, creando oportunidades de soluciones pacíficas para las partes involucradas”.
Humo se eleva desde una zona de Nagorno-Karabaj el 19 de septiembre de 2023. Foto: Ministerio de Defensa de Azerbaiyán/AP
Nagorno-Karabaj declaró su independencia de Azerbaiyán en 1988 y desde entonces ha recibido el respaldo de Ereván. Bakú perdió el control de Nagorno-Karabaj y sus alrededores a principios de la década de 1990, pero recuperó el control parcial después de una guerra de 44 días en 2020.
Nagorno-Karabaj es el hogar de unos 120.000 armenios étnicos, pero es reconocido internacionalmente como parte de Azerbaiyán. Esta ha sido fuente de conflicto entre los dos países vecinos durante las últimas tres décadas.
El conflicto de 2020 terminó con un alto el fuego negociado por Moscú que incluyó el despliegue de una fuerza de mantenimiento de la paz rusa de 2.000 efectivos en la región. Sin embargo, Armenia cree que Rusia no está dispuesta a protegerla de Azerbaiyán a pesar de que ambos países son aliados desde hace mucho tiempo.
Las tensiones han vuelto a aumentar en los últimos meses después de que Azerbaiyán bloqueara el corredor de Lachin en diciembre del año pasado, cortando la única carretera que conecta Nagorno-Karabaj con Armenia.
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