Ha habido muchos ejércitos heroicos en el mundo desde el pasado hasta el presente, pero los héroes en la pobreza, héroes tan simples como los soldados del tío Ho son verdaderamente únicos.
El heroico Ejército Popular de Vietnam no sólo ha cumplido siempre con éxito su misión de luchar contra los invasores extranjeros y construir y proteger la Patria, sino que también es un ejército benévolo, que ama a su propio pueblo pero también se solidariza con la gente de todo el mundo .
Cuando los soldados vietnamitas "boinas azules" partieron al extranjero, a países africanos pobres y devastados por la guerra, para dedicarse a misiones de paz de la ONU, fueron recibidos por el pueblo africano con gran admiración y afecto. Tan solo escuchar la palabra "Vietnam" hizo que muchos africanos se pusieran de pie y gritaran "¡Vietnam! ¡Vietnam!".
80 años de historia del Ejército Popular de Vietnam son una historia extremadamente ardua, sacrificada pero gloriosa para el pueblo vietnamita . Lo más especial de nuestro ejército es su espíritu de solidaridad y unidad. Comandantes y soldados siempre miran en la misma dirección, ya sea combatiendo en el campo de batalla o protegiendo al pueblo de desastres naturales y epidemias, nuestro ejército "Estrella Amarilla" siempre responde con una sola voz.
Los desastres naturales de 2024 fueron terribles. El pueblo étnico Tay de la aldea Lang Nu, comuna de Phuc Khanh, distrito de Bao Yen, Lao Cai , grabará en su memoria las aterradoras y devastadoras inundaciones repentinas. Pero los habitantes de Lang Nu también recordarán con más intensidad la imagen de los soldados del tío Ho, quienes estuvieron presentes justo cuando ocurrieron las inundaciones repentinas y, junto con la gente, combatieron las inundaciones, salvaron a la gente y luego reconstruyeron una nueva aldea Lang Nu para que la gente no solo tuviera un lugar donde vivir, sino también la oportunidad de vivir felices después del desastre.
El espíritu de solidaridad de nuestro ejército, "por el pueblo, olvidándose de sí mismo", surgió de los soldados del Tío Ho desde sus inicios. Estos soldados fueron guiados, entrenados e inculcados por el propio Tío Ho, de modo que contamos con un ejército no solo fuerte, sino también con una gran moral, que sabe amar al pueblo y compartir con él las alegrías y las penas.
El general Giap Van Cuong, primer almirante de la Armada Popular de Vietnam, dijo una vez a sus soldados: "No quiero torturarlos. ¿Qué valor tienen estas rocas áridas para que tengamos que protegerlas? Pero esta es nuestra patria, nuestra sangre. No estamos protegiendo estas rocas salvajes, ¡sino el mar! Perder las islas significa perder el mar, y el mar nos rodea de norte a sur. Todos los enemigos que nos atacan vienen del mar. Así que debemos proteger las islas, proteger el mar. Por muy difícil que sea, debemos protegerlas, ¡aunque muramos!"
El máximo comandante de la Armada Popular de Vietnam confió que, los militares navales lo consideraban una orden militar de amor, cómo no iban a llevarlo a cabo al más alto nivel, logrando los mejores resultados.
Nuestros héroes son tan sencillos y encantadores. El ejército es una gran familia.
En los últimos 80 años, millones de niños han crecido en esa familia.
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