Los siguientes ajustes ayudarán a tu cuerpo a quemar grasa de manera más efectiva sin requerir demasiados cambios en tu rutina diaria.
Dormir a tiempo en un dormitorio oscuro y fresco también ayuda a perder peso.
FOTO: AI
Cena temprana
Un estudio publicado en la revista Obesity demostró que las personas que cenan temprano, específicamente antes de las 7 p.m., y no comen nada más después tienen un mayor nivel de quema de grasa durante la noche que los que cenan tarde, según el sitio web de salud Healthline (EE. UU.).
Además, la cena debe ser moderada, baja en almidón blanco y rica en proteínas. Esta comida equilibrada ayuda al cuerpo a mantener niveles estables de azúcar en sangre y a limitar la acumulación excesiva de grasa.
Haga algún ejercicio ligero antes de acostarse.
Hacer ejercicio de alta intensidad poco antes de acostarte aumenta la temperatura corporal, lo que dificulta conciliar el sueño. Sin embargo, de 15 a 30 minutos de ejercicio ligero, como caminar, acelera el metabolismo y aumenta la quema de grasa incluso mientras duermes.
Beber té de hierbas
Ciertas infusiones, como el té verde descafeinado, el té de jengibre o el té de canela, pueden ayudar a acelerar el metabolismo y estabilizar el azúcar en sangre mientras duermes. Se ha demostrado que el té de jengibre aumenta la termogénesis, el proceso por el cual el cuerpo quema energía para generar calor.
Además, beber té caliente por la noche también ayuda a relajar el sistema nervioso y a reducir los niveles de la hormona del estrés cortisol, que contribuye al aumento de la acumulación de grasa abdominal.
Apaga las luces del dormitorio.
La luz artificial nocturna, especialmente la de lámparas, pantallas de teléfonos y computadoras, puede alterar la hormona melatonina, que regula el sueño. La melatonina no solo ayuda a dormir bien, sino que también afecta el metabolismo energético.
Un estudio publicado en el Journal of Pineal Research descubrió que la melatonina aumenta la actividad del tejido graso pardo, el tipo de grasa que quema calorías para generar calor.
Además, la temperatura del dormitorio también afecta la quema de grasa. Según los Institutos Nacionales de Salud de EE. UU. (NIH), al dormir en una habitación fresca, a unos 19-20 grados Celsius, el cuerpo aumenta la actividad del tejido adiposo pardo para mantener el calor, consumiendo así más calorías, según Healthline .
Fuente: https://thanhnien.vn/4-dieu-can-lam-vao-buoi-toi-de-tang-dot-mo-khi-ngu-185250801161626304.htm
Kommentar (0)