Según Business Insider , un portavoz de KLM dijo que algunos de los baños del Boeing 787 Dreamliner dejaron de funcionar en un vuelo de Ámsterdam, Países Bajos a Los Ángeles, EE. UU. el lunes, lo que obligó a los pilotos a regresar al aeropuerto de salida.
Inmediatamente después del despegue, los auxiliares de vuelo se dieron cuenta de que sólo un baño del avión seguía siendo utilizable.
El vuelo tuvo que regresar a mitad del trayecto.
Los datos de Flightradar24 muestran que los pilotos inicialmente consideraron regresar a Ámsterdam tras aproximadamente una hora en el aire. El avión sobrevoló el norte de Inglaterra antes de que los pilotos decidieran continuar.
Pero dos horas más tarde, el piloto decidió dar la vuelta y regresar al aeropuerto Schiphol de Ámsterdam, lo que significó que los pasajeros tuvieron un vuelo de seis horas y media en el aire.
El vuelo KL601 con destino a Los Ángeles regresó a Ámsterdam el lunes tras descubrir que el baño ya no funcionaba correctamente. Este incidente ocurrió después del despegue, informó KLM.
Posteriormente, la aerolínea sustituyó el 787 por otro, que partió de Ámsterdam nueve horas más tarde de lo previsto originalmente.
El avión con el baño defectuoso parecía haber sido reparado durante la noche mientras volaba a Houston y regresó el martes, según Flightradar24.
Ya han ocurrido antes daños en los baños que hacen que los aviones den la vuelta, pero los daños completos son poco frecuentes.
Los desvíos de aviones debido a inodoros defectuosos son poco frecuentes, pero no inauditos. El pasado abril, 300 pasajeros de Austrian Airlines tuvieron que cambiar sus vuelos después de que cinco de los ocho inodoros fallaran.
Y en 2018, un vuelo de Norwegian irónicamente tenía 85 plomeros a bordo, pero tuvo que regresar al aeropuerto debido a un mal funcionamiento del inodoro.
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