El Sr. Bio añadió que las operaciones de seguridad y las investigaciones seguían en curso. «Nos aseguraremos de que los responsables rindan cuentas», declaró a la televisión de Sierra Leona.
Anteriormente, el gobierno dijo que las fuerzas de seguridad habían repelido a “soldados rebeldes” que intentaron irrumpir en un depósito de armas militares en Freetown la madrugada del 26 de noviembre. Se impuso un toque de queda en todo el país cuando los atacantes abrieron fuego frente a una prisión y una comisaría.
No estaba inmediatamente claro si hubo víctimas en el ataque al cuartel o en el tiroteo en Freetown.
El ejército se movilizó para garantizar la seguridad en Freetown el 26 de noviembre.
Un video que circula en redes sociales muestra a varios reclusos escapando de la prisión central. Según AFP, las autoridades de Sierra Leona aún no han confirmado el número de fugados. Un informe del Departamento de Estado de EE. UU. indicó que la instalación estaba diseñada para albergar a 324 presos, pero en 2019 albergó a más de 2000.
El expresidente de Sierra Leona, Ernest Bai Koroma, afirmó que un guardia de su residencia en la capital recibió un disparo, mientras que otro fue trasladado a un lugar desconocido. El Sr. Koroma no especificó quién disparó al guardia.
La autoridad de aviación civil de la nación de África occidental instó a las aerolíneas a reprogramar los vuelos después de que se impusiera el toque de queda, mientras que un soldado en la frontera con la vecina Guinea dijo a Reuters que habían recibido instrucciones de cerrar la frontera.
El ministro de Información, Chernor Bah, declaró previamente que las fuerzas de seguridad de Sierra Leona habían logrado ciertos avances en la detención de los implicados en el ataque, pero no ofreció más detalles. Fuentes informaron que tres hombres, dos con uniforme militar y uno de civil, fueron vistos con las manos atadas en un camión militar rodeado de soldados.
La tensión en Sierra Leona ha sido alta desde la reelección del Sr. Bio en junio, cuando su principal candidato de la oposición impugnó el recuento de votos. Estados Unidos y la Unión Europea también cuestionaron su victoria.
Anteriormente, en agosto de 2022, al menos 21 civiles y seis policías murieron durante las protestas antigubernamentales en Sierra Leona, un país que todavía se recupera de una guerra civil de 1991-2002 que mató a más de 50.000 personas.
Según el Sr. Bio, las protestas son un intento de derrocar al gobierno. Se han producido ocho golpes militares en África Occidental y Central desde 2020.
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