Dolorosa realidad
La situación del comercio de productos falsificados y de mala calidad y de las violaciones de la seguridad alimentaria en Vietnam se está volviendo cada vez más complicada, especialmente en áreas directamente relacionadas con la salud pública, como los medicamentos, la leche y los alimentos funcionales.
Según el Comité Directivo Nacional 389, solo en los primeros cuatro meses de 2025, las autoridades gestionaron más de 34.000 infracciones y procesaron casi 1.400 causas penales con más de 2.100 acusados. Estas cifras son alarmantes y reflejan una dura realidad en la gestión del mercado.
Profesor asociado, Dr. Ngo Tri Long, experto en economía . Foto: Le Anh |
La causa subyacente de esta situación se puede ver desde muchas perspectivas:
En primer lugar, debido a las enormes ganancias y los bajos costos de producción, muchos sujetos han violado la ley para producir y comercializar productos falsificados. Especialmente en el sector de los alimentos funcionales, se está abusando gravemente de las regulaciones sobre el mecanismo de autodeclaración del Decreto 15/2018/ND-CP.
En segundo lugar, los mecanismos de gestión y postinspección aún presentan numerosas lagunas, lo que permite que se cuelen muchos productos de baja calidad. Las inspecciones son principalmente reactivas y carecen de herramientas de seguimiento proactivas.
En tercer lugar, el fuerte crecimiento del comercio electrónico y las redes sociales se están convirtiendo en los principales canales de distribución de productos falsificados, ya que las plataformas digitales aún no controlan estrictamente las actividades de los vendedores.
En cuarto lugar, las sanciones actuales no son suficientes para disuadir a la población. Las ganancias derivadas de las infracciones son demasiado elevadas en comparación con las multas, lo que lleva a muchas personas a aceptar riesgos para su propio beneficio.
En quinto lugar, la concienciación del consumidor aún es limitada. Muchas personas aún priorizan los precios bajos y carecen de la capacidad para distinguir entre productos auténticos y falsificados.
Además, el papel de las plataformas digitales en la facilitación de productos falsificados es cada vez más evidente. Según las estadísticas, en 2024, el número de infracciones en plataformas de comercio electrónico aumentó un 266 % en comparación con 2023, lo que demuestra una explotación cada vez más sofisticada. Entre las formas comunes de infracción se incluyen la falsificación de marcas, la publicidad engañosa y la contratación de líderes de opinión clave (KOL) para comercializar productos de baja calidad, lo que perjudica tanto a los consumidores como a las empresas legítimas.
Pasar de campañas a corto plazo a estrategias a largo plazo
Ante esta situación, el Primer Ministro emitió el Despacho Oficial No. 65/CD-TTg sobre el lanzamiento de un período pico para combatir y repeler el contrabando, el fraude comercial, los productos falsificados y la infracción de la propiedad intelectual. Las cifras de la campaña muestran ciertos esfuerzos. La información en la sesión de trabajo del Primer Ministro con ministerios, ramas y agencias centrales para evaluar el trabajo de combate al contrabando, el fraude comercial, los productos falsificados, la infracción de la propiedad intelectual y el origen de los bienes en los primeros meses de 2025 y la dirección y las tareas para el tiempo venidero mostró que hubo 34,000 infracciones, más de 4,897 billones de VND recaudados para el presupuesto y casi 1,400 procesamientos en los primeros meses del año. Sin embargo, la efectividad aún no está a la altura de las expectativas cuando la reincidencia es común y muchas redes aún operan con trucos cada vez más sofisticados.
Las autoridades del mercado inspeccionan la Plaza Saigón. Foto: Khanh An |
Por lo tanto, las campañas de corto plazo deben transformarse en estrategias de largo plazo con soluciones clave:
En primer lugar, endurecer las sanciones y el procesamiento penal de las plataformas de comercio electrónico que infrinjan la ley. El comercio electrónico representa actualmente más del 8 % de los ingresos minoristas totales del país (estimados en 24 000 millones de dólares en 2024), pero muchas plataformas aún no controlan eficazmente el origen de los productos.
Según un informe del Ministerio de Industria y Comercio , hasta un 35% de los productos vendidos en plataformas carecen de información completa sobre su origen, mientras que la retirada de productos infractores sigue siendo lenta. El Código Penal de 2015 (enmendado) estipula claramente que las organizaciones e individuos que aprovechen las plataformas digitales para consumir productos falsificados pueden ser procesados con penas de prisión de 1 a 5 años (artículos 192 y 193). El proyecto de decreto revisado sobre comercio electrónico de 2025 propone una multa de 10 a 50 millones de VND para las plataformas que no cumplan con sus obligaciones de verificar a los vendedores y rastrear su origen. En caso de infracciones graves, las plataformas pueden ser suspendidas hasta por 36 meses. Elevar el nivel de las sanciones y aplicar sanciones penales no solo tiene un efecto disuasorio, sino que también obliga a las plataformas a pasar de un modelo de "hacer la vista gorda" a un control proactivo de la calidad de los productos.
En segundo lugar, la aplicación de la tecnología digital en la autenticación y el monitoreo de productos. La tecnología es clave para crear una barrera técnica sostenible contra la falsificación. Actualmente, muchas grandes empresas han comenzado a implementar sellos inteligentes, pero aún no son populares en todo el mercado. El Ministerio de Industria y Comercio está coordinando con el Ministerio de Ciencia y Tecnología para implementar una nueva generación de sellos electrónicos antifalsificación que integran códigos QR, chips NFC y tecnología de cifrado blockchain, lo que ayuda a los consumidores a rastrear el origen con un solo toque en el teléfono.
En tercer lugar, perfeccionar el marco legal y el mecanismo de coordinación intersectorial. La Ley de Protección al Consumidor revisada (2023) ha creado un nuevo cauce legal para controlar el comercio electrónico, pero es necesario reforzar la aplicación de la normativa con regulaciones más detalladas: añadir regulaciones que exijan a las plataformas de comercio electrónico proporcionar datos del vendedor e historial de transacciones cuando las autoridades lo soliciten.
Fortalecimiento de la gestión de las ventas a través de redes sociales, especialmente las transmisiones en vivo, que se espera representen el 15 % de las transacciones de comercio electrónico en Vietnam para 2025 (estimación del Departamento de Comercio Electrónico y Economía Digital). Establecimiento de un mecanismo de coordinación permanente entre las siguientes fuerzas: Administración de Mercado, Policía Económica, Aduanas, Inspección Especializada y Comités Populares Provinciales.
Actualmente se está probando un modelo coordinado típico en Ciudad Ho Chi Minh y Hanoi, que muestra un aumento del 30% en el número de violaciones detectadas en comparación con el enfoque descentralizado anterior.
En cuarto lugar, fortalecer las comunicaciones de alerta y fomentar la concienciación pública. Uno de los factores que provoca la persistencia de los productos falsificados es la falta de información y vigilancia entre los consumidores.
Según una encuesta del Institute for Brand Strategy Research (2024), 1 de cada 3 consumidores en línea ha comprado productos falsificados o de mala calidad. Es necesario invertir en la creación de un centro de alerta temprana de falsificaciones en línea, integrando chatbots de IA para respuestas automáticas y aplicaciones de retroalimentación del consumidor, con enlaces directos al sistema de recepción de la fuerza de gestión del mercado. Incentive a los medios digitales, las redes sociales y los líderes de opinión a participar en la campaña para identificar productos falsificados y genuinos, centrándose especialmente en sectores de alto riesgo como productos farmacéuticos, cosméticos, alimentos funcionales y electrónicos.
En quinto lugar, la responsabilidad de empresas y consumidores. La lucha contra la falsificación no es solo responsabilidad del Estado, sino que también requiere la cooperación de empresas y consumidores. Las empresas deben registrar proactivamente sus marcas, aplicar tecnología de trazabilidad y anticopia, y supervisar las cadenas de suministro de entrada y salida. Para los consumidores, es necesario cambiar el hábito de comprar barato, priorizar los canales oficiales, verificar los códigos de autenticación e informar de inmediato a las autoridades al detectar indicios de productos falsificados.
El punto álgido de la lucha para prevenir y repeler el contrabando, el fraude comercial, las mercancías falsificadas y las infracciones de propiedad intelectual es un primer paso importante. Sin embargo, para prevenir las mercancías falsificadas de forma sostenible, se necesita una estrategia integral a largo plazo que transforme el corto plazo en largo plazo, desde campañas hasta instituciones, combinando estrechamente sanciones estrictas, tecnología moderna, coordinación intersectorial, comunicación comunitaria y responsabilidad social. En una economía digital en rápido desarrollo, esto no es solo una cuestión de comercio, sino también de confianza y seguridad nacional. |
Profesor asociado, Dr. Ngo Tri Long - Experto económico
Fuente: https://congthuong.vn/cuoc-chien-chong-hang-gia-can-the-che-va-cong-nghe-391670.html
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