
En el estudio, publicado en JAMA, 19 niños recibieron válvulas cardíacas de donantes. El paciente más joven tenía tan solo dos días de vida, mientras que los demás tenían menos de 16 años. Los resultados de un seguimiento promedio de seis meses mostraron que todas las válvulas trasplantadas funcionaron con normalidad y continuaron desarrollándose en paralelo con el desarrollo natural del cuerpo del niño.
Según el Dr. Joseph Turek, jefe del equipo de investigación, la ventaja destacada de este método es que las nuevas válvulas cardíacas no sólo garantizan un buen funcionamiento, sino que también requieren menos medicamentos inmunosupresores que un trasplante cardíaco total.
“Este estudio demuestra que el trasplante cardíaco parcial no solo es un éxito médico, sino también una opción flexible que puede aplicarse a diversas enfermedades cardiovasculares. Es una gran noticia para los niños y sus familias”, enfatizó.
En muchos casos, los médicos han realizado una técnica llamada “trasplante dominó”, lo que significa que los niños que necesitan un trasplante de corazón completo debido a enfermedades no relacionadas con las válvulas donarán sus válvulas cardíacas viejas y funcionales a pacientes que solo necesitan un trasplante parcial.
Hasta la fecha, no ha habido ningún caso que haya requerido una intervención quirúrgica adicional en la válvula cardíaca recién trasplantada, ni tampoco ha habido complicaciones graves relacionadas con los medicamentos inmunosupresores.
Sin embargo, los investigadores afirmaron que se necesita más tiempo para determinar la eficacia a largo plazo de este método. Afirmaron que el trasplante cardíaco parcial «no es una panacea, pero sí un avance prometedor que abre una nueva vía en el tratamiento de los defectos congénitos de las válvulas cardíacas».
Fuente: https://baohaiphong.vn/hy-vong-moi-cho-tre-di-tat-van-tim-bam-sinh-519628.html
Kommentar (0)