Israel anuncia la muerte del comandante de las fuerzas especiales de Hezbolá

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El ejército israelí afirma haber matado a tres miembros de Hezbolá, incluido el comandante de las fuerzas especiales del grupo, Radwan.

Aviones de combate de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) atacaron un edificio utilizado por Hezbolá en Nabatieh durante la noche del 14 de febrero, matando a Ali Muhammad al-Debes y a su lugarteniente Hassam Ibrahim Issa, dijeron hoy las FDI, refiriéndose a la ciudad del sur del Líbano.

Según las FDI, al-Debes es comandante de las fuerzas especiales de élite Radwan de Hezbolá. Las FDI lo acusan de participar en un atentado con bomba en el norte de Israel en marzo de 2023 y de planificar y ejecutar una serie de otros ataques contra Israel.

Hezbolá confirmó el mismo día que tres miembros, incluido Al-Debes, fueron asesinados, pero no especificó sus ubicaciones.

Ali Muhammad al-Debes, de 48 años, presunto comandante de Hezbolá, murió en un ataque de las FDI el 14 de febrero de 2024 (Hezbolá). — Ali Muhammad al-Debes, comandante de las fuerzas especiales de élite Radwan de Hezbolá. Foto: *Times of Israel*

Una fuente de seguridad afirmó que el ataque israelí contra Nabatieh causó la muerte de 10 personas, entre ellas tres miembros de Hezbolá y siete civiles. Al-Debes fue atacado y resultó herido en un ataque con drones israelíes en Nabatieh el 8 de febrero.

Este es el ataque más intenso y mortífero contra el Líbano llevado a cabo por las FDI desde que estalló la guerra de Gaza en octubre de 2023. La medida genera temores de una escalada del conflicto en la región.

"El enemigo pagará por estos crímenes", dijo Hassan Fadlallah, un funcionario de Hezbolá, añadiendo que la fuerza "tiene el derecho legítimo de proteger a su pueblo".

El edificio descrito por fuentes de seguridad como objetivo de un ataque aéreo israelí en Nabatieh, Líbano, el 15 de febrero. Foto: Reuters — El edificio descrito por fuentes de seguridad como objetivo de un ataque aéreo israelí en Nabatieh, Líbano, el 15 de febrero. Foto: *Reuters*

Los combates en la frontera entre Israel y el Líbano han sido casi diarios desde el ataque de Hamás a principios de octubre, pero en su mayoría han consistido en bombardeos de represalia a pequeña escala. Una fuente cercana a Hezbolá afirmó que la incursión en Nabatieh constituyó una escalada, pero que aún se ajustaba a las "reglas de combate no escritas" que la mayor parte de la violencia se mantuviera cerca de la frontera.

La portavoz del gobierno israelí, Avy Hyman, afirmó que el mensaje de Israel a Hezbolá siempre ha sido: «No nos desafíen». «Como ha dicho el ministro de Defensa, Yoav Gallant, desde el comienzo de la guerra, haremos con el Líbano exactamente lo mismo que le está sucediendo a Hamás en Gaza», advirtió Hyman.