La guerra de palabras entre Trump y Harris se intensifica cerca del día de las elecciones estadounidenses.

En el Madison Square Garden de Nueva York, el candidato republicano Donald Trump calificó a la candidata demócrata Kamala Harris como "un desastre que destruyó todo a su paso". Los aliados de Trump también acusaron a la Sra. Harris de haber comenzado su carrera como prostituta.

Los argumentos en la campaña electoral fueron acalorados y los votantes estadounidenses deben considerar dos visiones diferentes de liderazgo y del futuro de Estados Unidos antes de acudir a las urnas el 5 de noviembre.

El señor Donald Trump y la señora Kamala Harris. (Foto: AP)

La vicepresidenta Harris eligió un lugar cercano a la Casa Blanca para su último mitin de campaña. Ante una gran multitud de estadounidenses, Harris hizo hincapié en la gravedad y la amenaza que representa Trump. Cabe recordar que en ese mismo lugar Trump pronunció un discurso el 6 de enero de 2021 para protestar por los resultados de las elecciones presidenciales de 2020, en las que resultó vencedor Joe Biden.

En su discurso, la Sra. Harris también hizo hincapié en la postura de su oponente, quien priorizaba los intereses personales sobre los intereses nacionales.

“ Donald Trump ha pasado una década dividiendo a los estadounidenses y sembrando el miedo entre ellos. Esa es su verdadera naturaleza. Me comprometo a ser una presidenta para todos los estadounidenses, anteponiendo siempre el país al partido y a mis propios intereses”, declaró Harris.

La asesora principal Jen O'Malley Dillon señaló que el discurso final de la vicepresidenta Harris estaba dirigido a los votantes indecisos, muchos de los cuales son republicanos moderados.

“ Sabemos que aún hay muchos votantes indecisos sobre a quién apoyar o si votar o no. Esta contienda está muy reñida; hablamos de una elección con un margen de error. Sabemos que seguirá igualada en los próximos días”, dijo el asesor O'Malley Dillon.

El equipo del Sr. Trump se centra en contactar con votantes que participan con poca frecuencia o con aquellos que están frustrados con el rumbo del país y desean un cambio.

Sin embargo, el expresidente Trump ha enmarcado sus comentarios en los últimos días preguntando si la gente está mejor ahora que hace cuatro años, cuando dejó el cargo. Cuando Trump dejó la presidencia, las encuestas mostraban que la mayoría de los votantes estaban insatisfechos con el rumbo del país.

Cabe destacar que el candidato republicano anunció la mayor campaña de deportaciones de la historia de Estados Unidos e impuso aranceles generalizados para generar ingresos e impulsar la producción nacional.

El Sr. Trump también elogió la campaña en Nueva York como un "festival de amor" y no criticó al comediante Tony Hinchcliffe por sus comentarios racistas durante el evento. Otros oradores también hicieron comentarios racistas dirigidos a latinoamericanos, personas de color, judíos, palestinos o insultaron sexualmente a opositores demócratas, lo que preocupó a los aliados del Sr. Trump por las posibles repercusiones negativas en algunos estados clave.

El 29 de octubre, el expresidente estadounidense también evaluó la capacidad de liderazgo de la vicepresidenta Harris. El Sr. Trump afirmó que la Sra. Harris había "destruido" las fronteras nacionales, "perjudicado a la clase media ", llevado "sangre y suciedad" a las grandes ciudades y "provocado guerra y caos en todo el mundo ".

Jason Miller, asesor principal de Trump, afirmó haber esbozado planes para reactivar la economía , asegurar la frontera sur y “mejorar la vida cotidiana de las personas”. “Kamala Harris no ha hecho nada de eso”, declaró Miller.

En sus últimas campañas, la Sra. Harris se fue alejando gradualmente del estilo conversacional y desenfadado que caracterizó su entrada en la carrera presidencial. La vicepresidenta de Estados Unidos prometió solidaridad con el pueblo en su última campaña.

“El señor Trump es inestable, está obsesionado con la venganza, está constantemente resentido y quiere que su poder sea ilimitado. Este no es un candidato presidencial que piense en cómo mejorar su vida”, dijo el candidato demócrata .

La Sra. Harris a veces se dirige directamente a los votantes republicanos y promete escuchar a quienes no votaron por ella si resulta elegida. La vicepresidenta Harris ya ha revelado que incorporará a republicanos a su gabinete.

“A diferencia del señor Trump, no creo que quienes no están de acuerdo conmigo sean enemigos. Él quiere meterlos en la cárcel, yo les daré un lugar en la mesa”, declaró la señora Harris.

Antes de su discurso del 29 de octubre, la campaña demócrata se enfrentó a críticas del ala más a la izquierda del partido, que consideraba que la Sra. Harris estaba demasiado centrada en cortejar a los votantes republicanos moderados, e instaba a su candidato a centrarse más en la clase trabajadora que en la amenaza que el Sr. Trump supone para la democracia estadounidense.

Al final de su discurso, la Sra. Harris advirtió que el Sr. Trump estaba amenazando las normas democráticas y prometió tomar medidas contra el aumento de los precios de los alimentos y ayudar a los compradores de vivienda por primera vez con los pagos iniciales.

“Hacer dos cosas a la vez. Eso significa que pueden escuchar el debate sobre la libertad y los asuntos que afectan a su economía. Creo que sin duda tiene la capacidad de abordar ambos temas simultáneamente”, dijo el gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro.

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