Los niños con padres inteligentes tienden a tener mejores resultados académicos, incluso si no heredan los mismos genes que influyen en la inteligencia que sus padres, según un nuevo estudio realizado por el University College de Londres (Reino Unido).
Los investigadores creen que las habilidades de los padres pueden "influir" en sus hijos a través de su crianza. Por ejemplo, los padres dedican tiempo a leer con sus hijos y a ayudarlos a desarrollar hábitos de lectura, a estudiar con ellos y a desarrollar buenos hábitos de estudio...

Las capacidades de los padres siempre influyen en la realidad de sus hijos, independientemente de los factores genéticos (Foto: AS).
"A través de este estudio, hemos observado un fuerte vínculo entre la genética y el entorno. Esto podría cambiar la idea de que la genética por sí sola es decisiva para el desarrollo infantil", afirmó el Dr. José Morosoli, líder del estudio.
Tanto la genética como el entorno familiar creado por los padres influyen en el rendimiento académico y la salud mental de los niños. Además, el grado de influencia de la genética y el entorno también cambia a medida que los niños crecen.
Las intervenciones tempranas centradas en los estilos de crianza pueden ser muy eficaces cuando los niños son pequeños. Más adelante, a medida que crecen, los esfuerzos deben centrarse en sus propias actitudes y comportamientos.
El equipo recopiló datos de las vidas de 38.654 familias en el Reino Unido, Australia, Países Bajos, Islandia y Estados Unidos. En cuanto a la genética, el equipo recopiló datos de 4.580 familias en el Reino Unido.
Los resultados mostraron que los hijos de padres muy inteligentes a menudo obtienen mejores resultados académicos, incluso si no heredan los mismos genes que influyen en la inteligencia que sus padres.
Además, las investigaciones han demostrado que la salud mental y el comportamiento de los niños están muy influenciados por sus padres, independientemente de los factores genéticos. Esto es más evidente a los 3 años.
En esta etapa, las habilidades y los rasgos de personalidad de los padres tienen un fuerte impacto en sus hijos, expresados a través de la perseverancia, la resistencia, la paciencia y la capacidad de regular las emociones y controlarse. Cuando los padres poseen estas cualidades, a menudo pueden enseñar y apoyar a sus hijos a desarrollar buenos rasgos de personalidad en las primeras etapas de la vida.
En términos tanto del rendimiento académico como de la salud mental de los niños, los padres altamente competentes tienen un impacto positivo significativo en sus hijos durante su primera infancia, independientemente de si los niños heredan los mismos "genes inteligentes" que sus padres.
El profesor Jean-Baptiste Pingault, profesor del University College de Londres, afirmó: «Nuestra investigación refuerza aún más la idea de que el entorno vital y el estilo de crianza de los padres desempeñan un papel fundamental en el desarrollo infantil».
Fuente: https://dantri.com.vn/giao-duc/ly-giai-tai-sao-con-nha-tong-khong-giong-long-cung-giong-canh-20250513212539039.htm
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