En relación a la encuesta realizada a muchos profesores en China sobre su deseo de cambiar de puesto o ser transferidos a un departamento más adecuado, Sohu tiene un artículo que analiza este tema:
En los últimos días, esta encuesta ha causado mucho revuelo en las redes sociales chinas. Aunque la opinión pública aún se muestra escéptica sobre si muchos docentes se ven obligados a abandonar el podio, los propios integrantes del sector expresan lo siguiente: "Prefiero trabajar en el turno de noche en una funeraria que volver a ser profesor de aula".
Esta condición del docente plantea numerosos problemas. Mucha gente piensa que esto podría ser un brote colectivo de síndrome de burnout ocupacional o una señal de socorro del ecosistema educativo .

Habilidades docentes: más que solo enseñar
El currículum autocrítico de un profesor se está volviendo viral en las redes sociales chinas: "Suele calificar exámenes a las 3 de la mañana, es competente en PowerPoint, bueno resolviendo conflictos estudiantiles, tiene cualidades profesionales: a pesar de haber sufrido un ataque cardíaco, todavía logra terminar de enseñar y observar clases". Este relato puede parecer exagerado, pero refleja verdaderamente la forma en que los docentes “sobreviven” hoy en día:
- Línea de producción de “personas polivalentes”: además de enseñar, hoy en día los profesores de aula también proporcionan asesoramiento psicológico a los estudiantes, planifican y redactan contenidos de eventos y recopilan datos. Por eso, desde hace tiempo se les ha comparado con atletas de "decatlón" con múltiples talentos.
- “Experto” en sobrevivir bajo alta presión: Estar de pie durante 4 horas seguidas para dar clases es solo una habilidad básica, tener que lidiar con las quejas de los padres a altas horas de la noche es el mayor obstáculo.
- "Maestro" de la gestión emocional: En clase, el profesor tutor siempre puede mantener una sonrisa en su rostro con 40 estudiantes, pero cuando se enfrenta a la presión de la evaluación y el reconocimiento, cambia inmediatamente al modo de "análisis racional".
Cuando cada habilidad está claramente separada, muchas personas se dan cuenta de que los docentes son probablemente la "clase especial" más subvalorada en el mundo de oficina actual.
Traslado de trabajo: ¿escape o huida?
Una encuesta sobre aspiraciones de transferencia laboral realizada por el Departamento de Educación de una localidad de China mostró que el 38% de los docentes optaron por "ocupar cualquier puesto". Esta elección colectiva, aunque aparentemente ilógica, en realidad refleja la presión a la que se enfrentan los docentes:
- Síndrome de grave escasez de tiempo: En promedio, cada profesor de aula trabajará más de 12 horas/día, de las cuales el 30% del tiempo se dedica a gestionar tareas no relacionadas con la docencia.
- Crisis de pérdida de valor profesional: Cuando la educación se convierte en una carrera según KPI, la relación profesor-alumno se convierte gradualmente en números para informes estadísticos.
- Un agujero negro emocionalmente agotador: Ser profesor, miembro del personal administrativo y, ocasionalmente, tener que desempeñar el papel de maestro de ceremonias en actividades extracurriculares.
Aunque se trata de una broma del profesor de aula que "quiere ser guardia de seguridad de la escuela", refleja un simple deseo de un trabajo puro: hacer bien una cosa, sin realizar varias tareas a la vez, sin presión invisible. En el entorno educativo actual, esto se ha convertido en un lujo para ellos.
Querer mudarse: ¿cura o veneno?
En una ciudad de tercer nivel de China, después de un programa piloto de tres años de cambio de trabajo para maestros de aula, emergieron muchas cuestiones reflexivas: los maestros que pasaron a trabajar como bibliotecarios encontraron alegría en volver a introducir libros; Los docentes asignados al trabajo comunitario se han convertido en expertos en resolución de conflictos. Pero el otro lado de la moneda es:

- Desperdicio de experiencia: Un buen docente con 20 años de experiencia, al pasar al trabajo administrativo, sus competencias profesionales quedan seriamente "devaluadas".
- Fuga sistémica de cerebros: los buenos docentes abandonan paulatinamente el podio, lo que hace cada vez más grave el desequilibrio en la asignación de recursos educativos.
- Crisis de identidad: La brecha psicológica entre profesor y “empleado común”: una transición que no es fácil de superar psicológicamente.
Sobre esta cuestión, los investigadores educativos chinos señalan que: en lugar de decir que los profesores están ansiosos por cambiar de trabajo, más bien quieren pedir un retorno a la naturaleza de la educación. Porque cuando la preparación de las clases se convierte en una actuación para afrontar los exámenes, cuando la educación humana se transforma en una carrera por puntuaciones y logros, incluso los ideales profesionales más nobles se verán erosionados.
¿Una verdadera salida?
Para resolver este problema, una escuela secundaria clave en China ha experimentado con el modelo de "Laboratorio de Desarrollo Docente". Mediante la transferencia de tareas administrativas a unidades externas, estableciendo “vallas de protección al trabajo docente” y aplicando mecanismos de evaluación flexibles. Estos experimentos arrojaron resultados sorprendentes: la rotación de docentes se redujo en un 40% y los comentarios negativos de estudiantes y padres se redujeron en un 65%.
- Reducir trabajo: eliminar el 60% de contabilidad e informes innecesarios.
- Construir una valla protectora para los profesores, para que puedan centrarse en la enseñanza y no en las tareas domésticas.
- Crear un espacio para que los docentes descansen: permitir que la educación escape del círculo vicioso de la presión de los exámenes y los logros a corto plazo.
Cuando discutimos si los docentes deberían cambiar de trabajo, en esencia estamos cuestionando el sistema de valores sociales de la educación. Lo que necesitan los profesores no es una puerta para salir del podio, sino un camino de regreso al verdadero significado de la enseñanza. Porque lo que hace brillar a los estudiantes con pasión es la luz en los ojos del maestro. En lugar de soñar con la “vida ideal” después de dejar la profesión, volvamos a la educación, una tierra pura para nutrir ideales y pasiones: ese es el mejor “plan de transferencia laboral” para los docentes.

Fuente: https://vietnamnet.vn/nguyen-nhan-phuc-tap-ve-con-sot-giao-vien-muon-bo-nghe-2393177.html
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