Desde la antigüedad, cuando aún no se habían establecido las escuelas, los niños vietnamitas, especialmente los del campo, sabían crear numerosos juegos. Había juegos que se jugaban en grupos pequeños, como canicas, trompos (gù), canicas, volantes, volar cometas, voleibol, apilar brotes y flores, el escondite, la natación, el ajedrez, la rayuela... Había juegos adecuados para grupos, como soltar sanguijuelas y tortugas, el nu na nu nong, la serpiente dragón a las nubes, los simulacros de batalla, el tira y afloja...
Hay juegos que solo requieren acción (es decir, no se necesitan palabras, lo que resulta divertido y atractivo). Hay juegos que necesitan palabras para acompañar cada movimiento, como el voleibol. También hay juegos que necesitan una canción para que, al terminar, sepamos si el juego ha terminado o no, como: "Suelta la tortuga sanguijuela", "Nu na nu nong", "Surca las nubes con serpiente dragón"... Las canciones infantiles acompañadas de juegos se denominaron posteriormente rimas infantiles. Estos juegos también se clasifican como juegos folclóricos vietnamitas.
Los juegos populares infantiles no suelen ser difíciles de jugar, ni complejos, ni requieren práctica. Esa es su atracción a largo plazo. Muchos juegos no requieren herramientas o, si las requieren, son muy sencillos, fáciles de hacer y fáciles de encontrar. Por ejemplo, el voleibol solo requiere unas pocas docenas de palos con una pelota de arcilla blanda o una berenjena pequeña. Los objetos para jugar al trompo (gù) se tallan hábilmente a partir de troncos desechados. Para jugar a las canicas, estas se pueden hacer con arcilla cocida en la cocina hasta obtener piedras verdes duras o redondeadas... Monedas, piedritas, semillas de gac, gomas elásticas, trozos de papel, hilos, palos, aros de baloncesto rotos... todos pueden convertirse en herramientas para jugar. Por lo tanto, jugar no es caro.
El número de jugadores también es muy flexible: puedes añadir o quitar a algunas personas y seguir jugando. Lo mismo ocurre con el lugar y la hora de juego: puedes jugar a cualquier hora, de día o de noche, especialmente en noches de luna. Los niños pueden elegir jugar dentro de casa, en el patio, en la puerta, en el dique, en el césped, en el arrozal (después de haber sacado todo el arroz), en la cuneta, en el montón, en la colina... Se puede ver que todos los juegos son divertidos. Divertido porque los niños pueden jugar con los pies, las manos, los ojos, los oídos y mover todo el cuerpo. Pueden hablar, reír, gritar, cantar... Por estas razones, el juego no tiene fin, nunca se aburre. Jugar hoy y volver a jugar mañana sigue siendo tan divertido como siempre.
Volviendo al juego "Dragón y Serpiente: Sube a las Nubes", el nombre del juego se refiere a dos animales (dragón y serpiente). Ambos comparten características: cuerpo largo, sinuoso y muy flexible y ágil. La formación de los niños es flexible y ágil, como la de un dragón y serpiente. El número de jugadores es variable.
Entre ellos se encontraban dos personajes importantes: el médico y el creador de cabezas de dragón. Se trataba de un juego que consistía en cantar canciones infantiles y responder.
En la canción infantil, todos los niños que representaban los papeles de dragón y serpiente cantaron. En cuanto al diálogo, solo los dos niños que representaban los papeles de médico y cabeza de dragón y serpiente interpretaron los papeles.
La canción infantil dice así: «Dragón serpiente sube a las nubes/Encuentro con un árbol tembloroso/Tambores y tambores/Repaso de tropas». El diálogo consiste en que el dragón serpiente pregunta: «¿Está el doctor en casa?». El doctor responde sí o no. Si está en casa, el doctor pregunta además:
-¿A dónde van los dragones?
-Ve a buscar la medicina para el niño.
- ¿Cuántos años tiene?
-Tengo 1 año.
-La medicina del médico no es buena.
-Tengo 2 años.
-La medicina del médico no es buena...
Así continuó hasta que la serpiente dragón dijo: «Tengo 10 años». Entonces el médico preguntó: «¿Su medicina es buena?». Entonces el médico dijo: «Por favor, deme la cabeza». La serpiente dragón respondió: «Todos los huesos están mal». El médico continuó: «Por favor, deme la parte central». La serpiente dragón respondió: «La sangre». El médico terminó: «Por favor, deme la cola». La serpiente dragón respondió: «Puedes ahuyentarme todo lo que quieras» (o si puedes ahuyentarme, puedes comértela).
El juego estaba en su clímax. El doctor estaba corriendo tras la cola.
La cabeza del dragón tuvo que extender los brazos y girar para evitar que el doctor le protegiera la cola. Los niños en el cuerpo del dragón tuvieron que aferrarse fuertemente a los costados del otro (si alguno se soltaba, sería un desastre) y, al mismo tiempo, tuvieron que moverse rápidamente para esconder sus colas, para que el doctor no se las cortara. Este fue un momento muy feliz. Los niños estaban tan ocupados riendo que no pudieron esconder sus colas a tiempo y el doctor las cortó.
El siguiente niño se convierte en la cola del dragón y el doctor lo atrapa de nuevo. El juego continúa. El doctor los atrapa uno a uno hasta que desaparecen todos. Los niños corren, ríen y hablan sin parar, cansados pero felices. Este juego puede durar hasta 30 minutos, dependiendo de la longitud del dragón y de la rapidez con la que el doctor atrape la cola.
Serpiente Dragón Sube a las Nubes es un juego colectivo para niños. La ventaja de este juego es que los niños pueden jugar libremente, aprender a conectar con sus amigos y deben ser ágiles y flexibles al moverse. El juego ayuda a los niños a reducir la presión del estudio y a fortalecer su espíritu de equipo. Este es el beneficio de jugar.
VAN DUY[anuncio_2]
Fuente: https://baohaiduong.vn/thoa-suc-vui-choi-rong-ran-len-may-400259.html
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