En un avión, el espacio personal, aunque solo sea un reposabrazos, es un lujo. Por lo tanto, es comprensible que los pasajeros quieran cambiarse a una fila de asientos vacía o sentarse junto al pasillo. Sin embargo, según los auxiliares de vuelo, cambiar de asiento arbitrariamente no solo es de mala educación, sino que también puede afectar la seguridad del vuelo.
“El intercambio de asientos no siempre está permitido debido a problemas de peso y equilibrio. Es muy importante y está diseñado para mantener el peso y el equilibrio de la aeronave”, dijo la exazafata Lia Ocampo. Los pilotos deben considerar muchos factores antes del despegue, como la cantidad de carga en la bodega y la posición de los pasajeros.
El equilibrio es especialmente importante en aviones pequeños. El problema más grave ocurre cuando los pasajeros se desplazan de la parte trasera del avión a la delantera o viceversa, lo que provoca un desplazamiento del centro de gravedad. Una investigación del Instituto de Aeronáutica de California también reveló que mover a varios pasajeros de asientos a un lado del pasillo a otro también afecta el equilibrio horizontal del avión.
Lo que molesta a los auxiliares de vuelo es cuando los pasajeros se cambian de asiento disimuladamente una vez que han subido al avión. En ese momento, lo más probable es que tengan que buscar al pasajero y pedirle que regrese a su asiento original, lo que podría retrasar la salida. Incluso si hay muchos asientos vacíos, no se apresure a cambiar de asiento sin consultar a los auxiliares de vuelo.
Las tripulaciones de vuelo entienden que existen razones legítimas por las cuales los pasajeros pueden querer cambiar de asiento, y hay muchas situaciones en las que los asistentes de vuelo pueden aprobar la solicitud.
“Estos incluyen problemas de movilidad, claustrofobia, necesidad de descanso, trastornos del sueño por parte de los niños o el deseo de sentarse con un acompañante, problemas con el asiento o la pantalla. Estos son motivos para cambiar de asiento”, dice Ocampo.
Un caso especial es trasladarse a un asiento en la salida de emergencia, donde hay amplio espacio para las piernas. Si el asiento está disponible, los pasajeros pueden solicitarlo al auxiliar de vuelo. Sin embargo, tenga en cuenta que debe gozar de buena salud, ser mayor de 15 años y estar capacitado para asistir a la tripulación en caso de emergencia.
Mostrar amabilidad y cortesía siempre es bienvenido. Al demostrar estas cualidades, los auxiliares de vuelo podrían permitirle cambiar de asiento o incluso recibir refrigerios, bebidas u otros artículos gratuitos durante el vuelo, dice Ocampo.
Según vnexpress.net
Fuente: https://baohanam.com.vn/du-lich/vi-sao-khong-nen-tu-doi-cho-tren-may-bay-166583.html
Kommentar (0)