Grave sequía en la cuenca de Muong Thanh de Dien Bien

La sequía provoca sed tanto en las personas como en los cultivos.

En Dien Bien hace un calor sofocante estos días. Los vientos cálidos y secos de Laos azotan los campos de Muong Thanh. El calor, sumado a la sequía, ha provocado el estancamiento de la producción. Los agricultores que viven en las tierras altas se enfrentan a dificultades aún mayores. No hay agua para la producción, e incluso el agua para el consumo diario escasea gravemente.

Al mediodía, el sol calentaba con más fuerza y las casas de los tailandeses en la aldea de Kha, en el barrio de Nam Thanh, parecían estar aún más deterioradas. La sombra de los árboles era escasa y el viento cálido soplaba por la aldea, marchitando los árboles. Al encontrarme con el señor Ca Van Thien, el jefe de la aldea de Kha, que acababa de regresar del campo, dejó el cubo en su motocicleta y suspiró: «Nunca habíamos vivido una sequía tan severa como este año. Las fuentes de agua se han agotado. No hay agua para el uso diario. Desde principios de año, muchas familias han cavado pozos, pero seguimos sin agua».

Antiguamente, cuando los tailandeses elegían un lugar para asentarse, siempre lo asociaban con una fuente de agua abundante. La aldea de Kha no es la excepción. Antes, el agua de los manantiales y arroyos fluía durante todo el año. Sin embargo, este año, desde principios de año, el agua del bosque se secó. Los arroyos que bajan de las montañas a los campos de Muong Thanh también se secaron. El señor Ca Van Thien no pudo ocultar su preocupación: «Treinta familias que viven cerca de la montaña carecen de agua para el uso diario. En la aldea hay agua corriente, pero solo las familias de las zonas bajas tienen agua disponible, mientras que las de las zonas altas se quedaron sin agua antes de poder abastecerse».

Nunca antes los habitantes tailandeses de la aldea de Kha habían sufrido una escasez de agua tan grave como en la actualidad. Han intentado de todo, perforando y excavando pozos, con la esperanza de conseguir agua potable, pero no es suficiente. La familia del señor Thien excavó con gran esfuerzo un pozo de varias decenas de metros de profundidad, pero aún no consigue ni una gota. A diario, tienen que ir a otras casas para lavar la ropa y bañarse. También tienen que pedir agua potable a las casas río arriba.

No solo en la aldea de Kha, sino también en otras aldeas, muchos hogares sufren una grave escasez de agua potable. El Sr. Luong Van Toan, presidente del Comité Popular del barrio de Nam Thanh, declaró: «Desde principios de año, las lluvias han sido escasas. Además, la producción agrícola de la zona depende principalmente de fuentes de agua naturales. La comuna también ha recibido solicitudes de suministro de agua potable por parte de los vecinos, pero aún no ha encontrado una solución satisfactoria».

Los arroyos se secan, los campos se resecan y se agrietan.

Actualmente, los tailandeses que viven aquí están preocupados. Todos los días tienen que buscar agua para comer. Mientras tanto, los arrozales cercanos al pueblo también se han secado este año. Al llevarme a visitar los arrozales de Tang San en la aldea de Kha, el Sr. Ca Van Thien, residente del pueblo, se entristeció aún más: «Cada año, se pueden obtener dos cosechas en este arrozal. Este año, debido a la falta de agua, los campos están completamente secos y, hasta ahora, no se pueden sembrar».

En el pasado, al entrar en una aldea tailandesa, se respiraba una atmósfera de paz y vitalidad. Los campos, tanto altos como bajos, estaban inundados. Las norias del arroyo giraban con regularidad, realzando la belleza de la tierra. Esa imagen ahora solo vive en la memoria de los agricultores. Cada campo está seco y agrietado. Muchas familias, arrepentidas por el esfuerzo y el dinero invertidos, intentaron agotar las últimas gotas de agua al comienzo de la temporada para sembrar. Pero desde principios de año hasta ahora, por falta de agua, el arroz no ha crecido. Tres meses después de la siembra, las plantas de arroz apenas alcanzan la altura de una mano. Muchos arrozales se han quemado y amarilleado.

No solo los habitantes del barrio de Nam Thanh, sino también muchas otras familias campesinas que viven alrededor de los campos de Muong Thanh atraviesan una situación extremadamente difícil. La sequía generalizada ha sumido a los agricultores en la pobreza en todos los sentidos. La mayoría de las familias tailandesas de la zona poseen muy poca tierra. Durante años, han arado y cultivado la tierra para tener suficiente alimento para todo el año. Este año, la cosecha de primavera-verano se considera perdida debido a la falta de agua para el cultivo.

Según las estadísticas de la provincia de Dien Bien, actualmente miles de hectáreas de arrozales y hortalizas en toda la provincia sufren escasez de agua; de las cuales 363 hectáreas de arrozales están dañadas por la sequía, distribuidas en los siguientes distritos: Muong Nhe (casi 20 hectáreas), Muong Ang (casi 20 hectáreas), Nam Po (casi 12 hectáreas) y la ciudad de Muong Lay (25 hectáreas).

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