El 1 de octubre, el Hospital Infantil Dong Nai anunció que acababa de tratar un caso de un objeto extraño peligroso alojado en el esófago.
Según miembros de la familia, D.QB, de 11 años (residente en la comuna de Phu Lam, provincia de Dong Nai), experimentó repentinamente dolor de cuello y vómitos mientras comía pastel de cumpleaños en su casa la noche del 29 de septiembre.
Al mismo tiempo, la familia descubrió un trozo de plástico con forma de oreja de conejo en el pastel, sospechando que el bebé B. se había tragado un trozo de plástico, por lo que inmediatamente llevaron a la niña al Centro de Salud Regional de Tan Phu y luego la trasladaron al Hospital Infantil Dong Nai.
Esa misma noche, los médicos atendieron a un niño con dolor de cuello, babeo excesivo, fatiga e incapacidad para comer o beber. El niño fue anestesiado rápidamente, se le realizó una endoscopia de urgencia y se le extrajo un trozo de plástico del esófago a la altura de las vértebras torácicas.

Un trozo de plástico transparente escondido en el esófago de un niño pequeño fue extraído por los médicos (Foto: NP).
Al compartir sus perspectivas sobre este caso, el Dr. Ngo Van Phan, Jefe del Departamento Interdisciplinario del Hospital Infantil Dong Nai, afirmó que el objeto extraño era un pequeño, delgado y transparente trozo de plástico, lo que dificultaba enormemente su detección. Aún más peligroso era que este trozo de plástico tenía baja radiopacidad, quedando casi completamente oculto en la placa de rayos X, lo que dificultaba aún más determinar la causa.
Afortunadamente, la familia detectó el problema a tiempo y sospechó que el niño se había tragado un objeto extraño. Esto permitió a los médicos actuar a tiempo.

Los médicos realizan la extracción endoscópica de objetos extraños en niños (Foto: NP).
Si no se detecta el trozo de plástico, un objeto extraño atascado durante mucho tiempo puede provocar esofagitis, abscesos e incluso mediastinitis, poniendo en peligro la vida del niño.
Con base en este caso, los médicos del Hospital Infantil Dong Nai aconsejan a los padres que revisen cuidadosamente y retiren cualquier objeto duro, plástico o metal de los alimentos antes de dárselos a sus hijos pequeños. Además, los niños no deben estar activos ni mirando el teléfono mientras comen.
Si un niño presenta síntomas inusuales o se sospecha que ha ingerido un objeto extraño, la familia debe llevarlo inmediatamente al centro médico más cercano para recibir tratamiento inmediato. Bajo ninguna circunstancia se deben utilizar remedios caseros. Esto puede desperdiciar tiempo valioso para el tratamiento y afectar negativamente la recuperación del niño.
Fuente: https://dantri.com.vn/suc-khoe/mieng-di-vat-trong-suot-nguy-hiem-an-trong-co-hong-be-trai-20251001155754947.htm






Kommentar (0)