Los huéspedes están listos para vivir una gran experiencia en LAMORI.
Mañana: Escuchando los susurros de la historia
Cuando el sol de la mañana penetra la tenue niebla, LAMORI despierta como una acuarela, donde las montañas y los bosques cobijan cada ladrillo antiguo, donde el susurro del viento narra la historia de la próspera dinastía Le. A pocos kilómetros del complejo, la antigua reliquia de Lam Kinh aún evoca el espíritu de los héroes nacionales que izaron la bandera de la sublevación en el corazón de la tierra de Thanh.
Al cruzar el Puente del Siglo, un puente que une dos mundos , los visitantes se adentran en el legendario espacio del Lago King Le. El agua cristalina refleja el cielo azul y las misteriosas ondas entrelazadas de cultura e historia. En tan solo una mañana, nuestras almas parecen bañarse por los recuerdos de nuestros antepasados, serenos y sagrados.
Un lago cristalino, una preciosa villa y unos cuantos "amigos de cuello largo" que pasan deslizándose todas las mañanas.
Mediodía: Toca el sueño de unas vacaciones elegantes
Bajo el sol del mediodía, LAMORI es tan dulce como los brazos de una madre: abraza, acaricia y alivia la fatiga. Las villas con techo inclinado se acurrucan bajo el verde dosel de árboles centenarios; cada suave brisa sopla a través del porche de madera, trayendo consigo el ligero aroma a hierba y flores. En el porche, una taza de té de loto caliente, un buen libro, una amplia vista de las ventosas montañas y bosques: ese es el verdadero significado de "resort": sin ruidos, sin ostentación, solo sofisticación, lujo y la sensación de vivir cada momento al máximo.
El sueño de unas vacaciones tranquilas.
El restaurante LAMORI destila la quintaesencia de la cocina de Thanh Hoa, desde especialidades de perca del río Chu, nem chua y che lam hasta platos modernos y saludables. Cada plato parece tener un aire celestial, delicado pero pleno, sencillo pero profundo.
Tarde: Despertar la fuente de vida desde dentro
Mientras el sol de la tarde proyecta un resplandor dorado sobre las montañas lejanas, LAMORI abre la tercera puerta: un viaje de bienestar total. El Ranee Spa está diseñado como un pequeño monasterio zen, donde el aroma de las hierbas se extiende suavemente por el cálido espacio de madera. Los huéspedes pueden optar por una sauna de sal del Himalaya, remojar los pies en baños de hierbas o relajarse con un masaje corporal completo con exclusivos aceites esenciales locales.
Más que solo cuidar tu cuerpo, cada momento en LAMORI es un viaje de conexión interior. Clases de meditación en el bosque, sesiones de yoga bajo el atardecer, el sonido de las campanas de viento en medio de verdes colinas: todo se funde en una sinfonía de paz y renovación.
Sol suave, brisa fresca, cientos de flores en flor.
Solo un día, pero se siente como otra vida. Un día en LAMORI es una armonía entre historia gloriosa, relajación exquisita y salud perfecta. Ven a sentir cómo el tiempo parece detenerse... Y regresa con un corazón lleno de paz, salud y gratitud por los valores eternos.
Minh Ngoc (Países Bajos)
Fuente: https://baothanhhoa.vn/mot-ngay--ba-trai-nghiem-tai-lamori-256884.htm
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