Las manzanas contienen hidroxiácidos (AHA) que estimulan las células epidérmicas del estrato córneo, lo que favorece la exfoliación de la piel opaca y áspera, a la vez que promueve la regeneración celular. Los AHA actúan para lograr una piel más suave y tersa, y reducir las arrugas.
Según un estudio de 2006 de la Universidad Nacional de Taiwán, los productos lácteos, como la leche de soja y el kéfir, pueden retrasar el envejecimiento de la piel.
Modo de preparación: Cocine al vapor 1/4 de manzana hasta que esté blanda y haga puré. Luego, mezcle dos cucharaditas de manzana con una cucharada de leche fresca y masajee suavemente la mezcla durante 15 minutos para estimular la absorción de los nutrientes. Enjuague con agua tibia.
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