Los Blues llegaron a Molineux con buen ánimo tras vencer al Newcastle en la tanda de penaltis y alcanzar las semifinales de la Copa de la Liga inglesa. El entrenador Mauricio Pochettino vio esta reñida victoria como un trampolín para asegurar tres puntos contra los Wolves y mantener sus esperanzas de alcanzar los cuatro primeros puestos.
El Chelsea ha vuelto a decepcionar en la Premier League esta temporada.
A pesar de la ausencia de varios jugadores clave por lesión, el Chelsea forjó un buen partido contra los Wolves en la primera mitad. Sin embargo, los visitantes solo tienen la culpa, ya que Sterling, Palmer y Jackson desaprovecharon varias buenas oportunidades para abrir el marcador.
Sin un auténtico delantero centro, los "Blues" vieron cómo se les escapaban las ocasiones, antes de pagar las consecuencias de un error defensivo al comienzo de la segunda mitad. Los Wolves no crearon muchas situaciones de peligro, pero el equipo local supo aprovechar al máximo el error de su rival para marcar en el minuto 51. Tras un saque de esquina, Mario Lemina cabeceó cómodamente el balón, batiendo al portero del Chelsea, Djordje Petrovic.
El futuro de Pochettino en el Chelsea es cada vez más incierto.
Varios cambios de plantilla por parte del entrenador Pochettino y el enfoque defensivo de los Wolves permitieron al Chelsea tomar la delantera tras encajar un gol. Sin embargo, una vez más, las estrellas ofensivas de los Blues fueron ineficaces de cara a portería. Incluso las esperanzas de sumar un punto se vieron frustradas cuando Matt Doherty amplió la ventaja en el minuto 90+3. Por lo tanto, el gol de consolación de Christopher Nkunku tres minutos después no pudo evitar que el equipo de Pochettino sufriera su octava derrota en la Premier League esta temporada.
Este resultado deja al Chelsea estancado en el décimo puesto, a 14 puntos de los cuatro primeros. Pochettino sigue enfrentándose a un futuro sombrío, ya que la paciencia del dueño estadounidense se está agotando.
Mientras tanto, los Wolves consiguieron su primera victoria consecutiva contra el Chelsea desde 1975. Este logro extendió la racha invicta del equipo de Gary O'Neil en casa en Molineux esta temporada a siete partidos, y ahora solo están detrás del Chelsea por diferencia de goles.
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