El tornado estuvo en tierra durante aproximadamente una hora y devastó un área de aproximadamente 274 kilómetros (170 millas) de largo, dijo Nicholas Price, meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional en Mississippi.
Un video de Rolling Fork, un pueblo de 1700 habitantes en el oeste de Misisipi, el más afectado, mostró casas reducidas a escombros. El tornado también derribó árboles y arrojó vehículos. Las principales estructuras de la zona también sufrieron graves daños.
El gobernador Tate Reeves, quien visitó Silver City, ciudad devastada por el tornado, declaró el estado de emergencia en las zonas afectadas. "La magnitud de los daños es evidente... Viviendas, negocios... comunidades enteras", escribió en Twitter.
En Alabama, los rescatistas sacaron a un hombre del lodo tras volcar su tráiler, pero falleció a causa de las heridas. Al parecer, era la única muerte reportada en el estado hasta el sábado por la tarde.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ofreció sus condolencias a las víctimas y prometió asistencia. "Haremos todo lo posible para ayudar... Trabajaremos juntos para brindarles el apoyo necesario para su recuperación", afirmó.
La Agencia de Gestión de Emergencias de Mississippi informó el sábado por la tarde que el número de muertos había ascendido a 25, con decenas de heridos. La agencia indicó que se había localizado a cuatro personas previamente reportadas como desaparecidas.
Al menos 12 de esas muertes ocurrieron en Rolling Fork, según declaró el alcalde Eldridge Walker a CNN ese mismo día. «Mi pueblo ya no existe, pero seguiremos en pie», declaró Walker a CNN.
Hoang Anh (según Reuters, AP, CNN)
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