El Congreso marca un hito histórico en la construcción de un Gobierno honesto, creativo y activo para el país y el pueblo. Este es un evento político verdaderamente importante que abre una nueva era y fortalece la confianza ciudadana en el liderazgo del Partido y en la labor del Gobierno.
El Congreso aprobó una Resolución con objetivos y metas muy ambiciosos, lo que demuestra un firme deseo de crecimiento: una tasa promedio de crecimiento del PIB del 10 % anual o superior; un PIB per cápita de aproximadamente 8500 USD para 2030; y una contribución de la productividad total de los factores (PTF) al crecimiento superior al 55 %. Para 2030, Vietnam aspira a situarse entre los tres primeros países del Sudeste Asiático y entre los 50 primeros del mundo en competitividad digital e índice de desarrollo del gobierno electrónico; y que la proporción de la economía digital alcance al menos el 30 % del PIB.
Estas ambiciosas cifras apuntan al año 2030, el centenario de la fundación del Partido, cuando nuestro país tendrá la apariencia, la posición y la estatura de un país industrializado moderno con una renta media-alta. Estos objetivos también sirven al más noble propósito: "Para el pueblo".
El presidente Ho Chi Minh afirmó una vez: «Nuestro país es un país democrático. Todos los beneficios son para el pueblo». El lema del primer Congreso de Gobierno: «Solidaridad, disciplina - Democracia, innovación - Avance, desarrollo - Cerca del pueblo, para el pueblo» ejemplificó claramente su consejo.
En retrospectiva, la macroeconomía se ha mantenido firmemente estable durante el último período, con un crecimiento del PIB impresionante, con una tasa estimada de crecimiento del 8,3-8,5 % en 2025 —la más alta de la región y una de las mejores del mundo— , lo que eleva el PIB promedio para todo el período 2021-2025 a un 6,3 %. Se han logrado importantes equilibrios y se ha mejorado la escala y la posición de la economía: se estima que el PIB en 2025 alcanzará aproximadamente los 510 000 millones de dólares, lo que situará a Vietnam en el puesto 32 del mundo y el 4 de la ASEAN, subiendo cinco puestos con respecto a 2020. Se estima que el PIB per cápita superará los 5000 dólares, lo que posicionará oficialmente a nuestro país en el grupo de países de ingresos medios altos.
Ese logro no fue pavimentado con alfombras de terciopelo sino con días de "vencer al sol, vencer la lluvia, no perder ante el viento y las tormentas", "comer rápido, dormir urgentemente", "trabajar en 3 turnos, 4 turnos" en sitios de construcción de líneas eléctricas de 500KV, carreteras y caminos costeros a lo largo del país; con noches de insomnio para reorganizar el país, crear desarrollo; y períodos "tensos como la cuerda de un arco" para proteger a las personas durante la pandemia de COVID-19, salvar a las personas de desastres naturales, tormentas e inundaciones.
La política de "priorizar la salud y la vida de las personas" se ha convertido en el principio rector de todas las acciones, demostrando profundamente la humanidad del régimen y recibiendo el consenso y apoyo absolutos de toda la población. Si bien Vietnam no es un país capaz de producir vacunas contra la COVID-19, hemos vacunado a toda la población de forma gratuita y nos hemos posicionado en el quinto puesto a nivel mundial. Gracias a la vacunación y a otros esfuerzos, las pérdidas humanas se han reducido a tan solo un tercio de las pérdidas mundiales (0,37 %, mientras que el promedio mundial es del 1-2 %).
El Gobierno en su conjunto y el Primer Ministro han demostrado un espíritu de solidaridad, unidad, trabajo conjunto y unanimidad, actuando con gran determinación política y un ardiente deseo de un Vietnam fuerte. La labor de dirección y gestión se ha llevado a cabo con determinación, dinamismo y creatividad, sin importar el día ni la noche, siempre atentos a la realidad para tomar decisiones oportunas y eficaces.
El espíritu de acción del Gobierno se refleja claramente en el lema: «El Partido ha dirigido, el Gobierno ha acordado, la Asamblea Nacional acuerda, el pueblo apoya, la Patria espera; entonces, solo hay que debatir, no retroceder», lo que refleja un gran consenso y determinación en todo el sistema político y social. Una vez que se alcanza un acuerdo sobre la política, el Gobierno centra todos sus esfuerzos en organizar su implementación, decidido a convertir las resoluciones y políticas en resultados concretos.
Y esos esfuerzos son para servir al pueblo, mejorar la vida material y espiritual del pueblo, de modo que el Índice de Felicidad de Vietnam en 2025 ascenderá al puesto 46, 8 puestos más en comparación con 2024 y 37 puestos más en comparación con 2020, una cifra espectacular en comparación con el comienzo del mandato.
Sin embargo, persisten las preocupaciones que el Secretario General To Lam planteó en el Congreso, a saber: la macroeconomía aún presenta riesgos potenciales; la reestructuración económica y la mejora de la calidad del crecimiento aún son lentas; la infraestructura no está sincronizada, especialmente el transporte, las zonas urbanas, la salud, la educación y la infraestructura digital. La vida de una parte de la población sigue siendo difícil; muchos problemas sociales apremiantes, como las inundaciones, la congestión, la seguridad vial y el medio ambiente, no se han resuelto de raíz.
Los desafíos sin precedentes, repentinos, inesperados y arduos del último mandato son la prueba del oro, dejando profundas lecciones para los próximos cinco años. El camino por delante no es fácil, ya que se prevé que la situación mundial seguirá cambiando de forma rápida, compleja e impredecible; la competencia estratégica entre los principales países y los centros de poder es cada vez más feroz y compleja, y crece en alcance e intensidad. A nivel nacional, la carga de trabajo es considerable, importante y urgente, con altos requisitos de implementación; desastres naturales, tormentas, inundaciones, fenómenos meteorológicos extremos con desarrollos impredecibles...
Las dificultades previstas requieren que el Partido y el Gobierno se esfuercen constantemente, se unan, colaboren, sean unánimes, innoven proactivamente, completen todas las tareas políticas asignadas, sirvan al pueblo, fortalezcan la confianza de la gente y mejoren aún más el Índice de Felicidad de Vietnam.
Según el Viceprimer Ministro Permanente, Nguyen Hoa Binh, el bagaje que traemos al próximo mandato es una gran determinación, un deseo de desarrollo y una mentalidad innovadora muy clara. Los objetivos son muy ambiciosos; este es un gran reto para el Gobierno en la próxima legislatura. Al analizar el programa de acción, vemos claramente el camino y las tareas que debemos llevar a cabo. "El Congreso fue un gran éxito en la sala, pero su resolución será verdaderamente exitosa cinco años después, cuando hagamos balance de lo logrado y la transformemos en realidad, en crecimiento económico, en una vida próspera y feliz para la gente, entonces tendremos un verdadero éxito".
Por lo tanto, el Comité del Partido de Gobierno debe formar un equipo que sea a la vez firme, especializado, profesional, dedicado, con capacidad de pensamiento y acción, valiente y responsable. Las políticas y directrices son acertadas, la determinación es grande, el pensamiento es innovador, las tareas y soluciones son integrales y claras, y con una buena preparación del equipo, el mandato 2025-2030 del Comité del Partido de Gobierno será exitoso.
Fuente: https://baotintuc.vn/thoi-su/tien-toi-dai-hoi-xiv-cua-dang-bao-nhieu-loi-ich-deu-vi-dan-20251014144109999.htm
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