La enuresis es una condición de micción incontrolada, común en niños pequeños, pero a veces también es una señal de advertencia de ciertas enfermedades.
La enuresis, también conocida como incontinencia urinaria, es una condición de pérdida del control de la vejiga, común en niños menores de 3 años debido a su débil capacidad para controlarla. Es un fenómeno normal y los padres no deben preocuparse demasiado. Sin embargo, según el Dr. Nguyen Hoang Duc, jefe del Departamento de Urología del Centro de Nefrología del Hospital General Tam Anh de Ciudad Ho Chi Minh, la enuresis a veces puede ser una señal de alerta de una enfermedad. Por lo tanto, si bien los padres no deben preocuparse demasiado, no deben ser subjetivos si sus hijos experimentan esta condición.
La enuresis puede ser anormal si persiste durante más de 6 meses, especialmente en niños mayores de 5 años, ya que más del 90 % de los niños a esta edad pueden controlar la micción. Además, los padres también deben prestar atención si el niño antes podía controlar la micción, pero de repente se orina en la cama.
La enuresis patológica puede estar relacionada con anomalías en la estructura y el tamaño de los órganos del sistema urinario infantil, especialmente la vejiga. Además, la enuresis también puede deberse a enfermedades que causan inflamación en la zona genital, como balanitis en niños y vaginitis en niñas, hongos genitales, vejiga pequeña, vejiga hiperactiva, trastornos endocrinos, anemia de células falciformes... Problemas de salud mental, como inhibiciones o problemas no resueltos, también pueden causar enuresis en niños.
Mojar la cama es un fenómeno común, pero también puede ser una señal de alerta de enfermedad. Foto: Freepik
El doctor Hoang Duc dijo que la enuresis en los niños se trata de la siguiente manera:
Adaptar las actividades y los hábitos de los niños
Los padres deben limitar el consumo de agua o leche de sus hijos cerca de la hora de dormir, lo cual ayuda a reducir la producción de orina y el riesgo de enuresis. En su dieta diaria, evite los alimentos picantes o condimentados que puedan irritar la vejiga del niño.
Los padres deben dejar que sus hijos orinen antes de acostarse. Luego, unos 30 a 60 minutos antes de la hora en que suelen orinarse, despiértenlos para que orinen de nuevo. Esto reducirá la incontinencia urinaria. Los niños deben usar ropa cómoda, especialmente al acostarse, para evitar que la ropa toque los genitales, lo que estimula la vejiga y provoca pérdidas de orina incontroladas.
Enseñar a los niños a controlar su vejiga como por ejemplo: orinar a una hora fija, cada 2-3 horas; relajar los músculos del suelo pélvico, evitando movimientos que presionen esta zona; orinar dos veces en una micción, este es un método de vaciado de la vejiga, aplicado principalmente a niños con vejiga hipoactiva, reflujo vesicoureteral.
Tratamiento conservador con medicación oral
Este método se aplica en casos graves en los que los niños no responden a los métodos de cambio de hábitos de vida ni al entrenamiento para el control de la vejiga. Los fármacos utilizados en el tratamiento suelen ser inhibidores del nervio vesical e inhibidores de la secreción urinaria.
El doctor Hoang Duc (centro) durante una cirugía para tratar una enfermedad urinaria. Foto: Hospital General de Tam Anh
El doctor Hoang Duc recomienda a los padres mantener la calma y no regañar a sus hijos cuando se hacen pis en la cama. Si bien no es una enfermedad compleja ni potencialmente mortal, esta afección afecta gravemente la psicología del niño. Los regaños de los padres pueden afectar gravemente la percepción que el niño tiene de sí mismo, haciéndolo pensar que mojar la cama es un mal comportamiento, generando en él un sentimiento de culpa y haciéndolo cohibido y retraído. Cuando la psicología del niño se ve afectada, la enuresis se agrava.
Phi Hong
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