El 31 de mayo, mientras Ucrania recibía la noticia de un nuevo paquete de ayuda militar estadounidense por valor de 300 millones de dólares, Rusia se mostraba descontenta con las medidas que Moscú acusaba de intensificar el conflicto.
Ucrania recibirá sistemas de defensa aérea y munición adicionales de EE. UU. por un valor de 300.000 millones de dólares. (Fuente: Reuters) |
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby, dijo que Estados Unidos proporcionará a Ucrania un nuevo paquete de ayuda militar por valor de 300 millones de dólares, incluyendo misiles de defensa aérea portátiles Stinger (MANPADS), sistemas de defensa aérea Avenger, municiones para sistemas Patriot y sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes HIMARS (MLRS).
Este es el 39º paquete de apoyo bajo los poderes especiales del Presidente de Estados Unidos, bajo los cuales el Presidente puede permitir la transferencia de bienes y servicios sin la aprobación del Congreso en caso de emergencia.
El Sr. Kirby añadió que los socios estadounidenses en el Grupo de los Siete (G7) ayudan a Washington a brindar apoyo a Ucrania, por lo que la ayuda militar a Kiev continuará.
Con el último paquete de ayuda, el valor total de la asistencia de seguridad estadounidense a Ucrania ha alcanzado los 37.600 millones de dólares desde que Rusia lanzó su operación militar especial en febrero de 2022.
Ese mismo día, el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania (FAU), Valeriy Zaluzhny, discutió con el jefe del Estado Mayor Conjunto de los EE. UU., Mark Milley, el plan de contraataque de las FAU.
“Hemos llamado la atención sobre el problema del suministro de armas, equipo militar y municiones. Entre las necesidades prioritarias se encuentran los proyectiles de artillería de largo alcance”, declaró Zaluzhny en su canal de Telegram.
El general militar ucraniano también solicitó fortalecer la defensa aérea de Ucrania con sistemas de defensa aérea adicionales y posiblemente proporcionar aviones de combate F-16.
Mientras tanto, reaccionando al último paquete de ayuda estadounidense, el embajador ruso en Washington, Anatoly Antonov, dijo: "Hemos notado la 'insistencia' de la administración estadounidense en escalar la crisis en Ucrania".
Según el diplomático , los funcionarios estadounidenses "una vez más hablan con orgullo de proporcionar ayuda financiera y otra clase de ayuda material a Kiev, mientras provocan a los países europeos a estrangular el desarrollo tecnológico de Rusia imponiendo barreras comerciales adicionales".
En el canal de Telegram de la Embajada de Rusia, el Sr. Antonov escribió: «Inmediatamente después de una serie de ataques perpetrados por personas patrocinadas por Estados Unidos contra Moscú y sus alrededores, en lugar de exigir al gobierno del presidente ucraniano Vladímir Zelenski que asuma la responsabilidad, Washington muestra indiferencia».
El Sr. Antonov hizo la crítica mencionada a pesar de que la Casa Blanca declaró públicamente que no apoyaba los ataques de las Fuerzas Armadas de Ucrania contra Rusia, mientras que Kiev negó su participación directa en el incidente que tuvo lugar en la mañana del 30 de mayo.
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