Los sofocos son uno de los síntomas más comunes y desagradables de la menopausia que afectan negativamente la salud física y mental de las mujeres. Entonces, ¿qué tan aterradores son los “sofocos”?
1. ¿Cuántas mujeres menopáusicas enfrentan el síntoma de “sofocos”?
Los sofocos son sensaciones repentinas e inesperadas de calor en todo el cuerpo acompañadas de sudoración. Los sofocos comienzan en la cara antes de extenderse al pecho y al resto del cuerpo. Pueden durar desde 30 segundos hasta 5 minutos.
Este es un síntoma típico de la menopausia, causado por cambios en la hormona estrógeno en el cuerpo. Cuando los niveles de estrógeno disminuyen, el mecanismo de regulación de la temperatura del cuerpo se ve afectado, lo que provoca sofocos repentinos y muy incómodos. Los sofocos pueden comenzar ya en la perimenopausia y durar meses o incluso años.
Los signos más comunes de los sofocos incluyen: Una sensación repentina e intensa de calor que puede aparecer en la cara, el cuello, los brazos, el torso y, a veces, todo el cuerpo; Latidos cardíacos y pulso rápidos o irregulares; Transpiración; Escalofríos; Mareos, dolor de cabeza, náuseas, ansiedad...
Los estudios informan que un porcentaje muy grande de mujeres que pasan por la menopausia experimentarán sofocos. Se estima que aproximadamente el 80% de las mujeres menopáusicas se ven afectadas por esta afección, muchas de las cuales sufren sofocos intensos. Según un informe de la Universidad John Hopkin (EE.UU.), aproximadamente el 75% de las mujeres menopáusicas experimentan sofocos, el 80% de los cuales ocurren durante dos años o menos, y algunas mujeres menopáusicas refieren sofocos intensos.
Los sofocos afectan negativamente la salud física y mental de las mujeres.
2. Los efectos negativos de los sofocos intensos
Provoca insomnio
Los sofocos son uno de los principales factores que provocan pérdida de sueño en las mujeres. Antes de un sofoco, la temperatura corporal de la mujer aumenta y el flujo sanguíneo a la cara aumenta, lo que crea una sensación de calor extremadamente incómoda.
Los sofocos que ocurren durante la noche, también conocidos como sudores nocturnos, son sensaciones repentinas e inesperadas de calor en todo el cuerpo acompañadas de sudoración. Los sofocos que ocurren durante el sueño y causan sudores nocturnos pueden provocar que muchas personas se despierten y pierdan el sueño.
Apnea del sueño
Los ronquidos y la apnea del sueño también se vuelven más comunes y graves en las mujeres posmenopáusicas. La apnea obstructiva del sueño se describe como un trastorno del sueño caracterizado por el cese temporal de la respiración, lo que produce jadeo, ronquidos y asfixia, junto con una disminución de la calidad del sueño.
Aumenta el riesgo de demencia
Aunque los síntomas vasomotores (sofocos y sudores nocturnos) han sido ampliamente estudiados y documentados, el vínculo entre los síntomas de la menopausia y el riesgo de deterioro cognitivo es un área de investigación creciente y emergente.
Uno Una nueva investigación que evaluó el estado cognitivo de casi 1.300 mujeres posmenopáusicas en nueve países latinoamericanos encontró que las mujeres con síntomas menopáusicos graves, como sofocos, trastornos del sueño y trastornos del estado de ánimo, están asociadas con un riesgo 74% mayor de deterioro cognitivo.
Hace que las mujeres sean más susceptibles a las enfermedades cardíacas
El insomnio debido a los sofocos no sólo afecta en gran medida la vida diaria sino que también es muy peligroso para la salud cardiovascular. Una investigación de la Asociación Estadounidense del Corazón muestra que aproximadamente 1 de cada 4 mujeres puede desarrollar ritmo cardíaco irregular después de la menopausia. Entre ellos, el estrés en la vida y la falta de sueño son los factores principales.
Otros estudios también han demostrado que los cambios físicos, biológicos y psicológicos, los sofocos frecuentes y persistentes en las mujeres menopáusicas están asociados con futuras enfermedades cardiovasculares.
Las mujeres con síntomas menopáusicos graves deberían considerar la posibilidad de realizarse una prueba de detección de enfermedades cardíacas.
3. ¿Pueden los cambios en el estilo de vida reducir los sofocos?
No todas las mujeres que pasan por la menopausia experimentan sofocos, y los factores que pueden aumentarlos y cómo se manifiestan son diferentes para cada persona. Los estudios muestran que las mujeres que fuman tienen más probabilidades de sufrir sofocos. Los sofocos también se asocian con un índice de masa corporal más alto, y las mujeres con sobrepeso y obesas tienen más probabilidades de tener sofocos más frecuentes y graves.
Por lo tanto, los médicos aconsejan a las mujeres menopáusicas que realicen cambios en su estilo de vida para controlar los sofocos antes de recurrir a intervenciones médicas . Las mujeres necesitan tener un estilo de vida saludable y actividades razonables. No trabajes demasiado, evita el estrés, duerme lo suficiente y come alimentos nutritivos. Limite el consumo de alcohol, alimentos picantes, bebidas calientes, cafeína y fumar, ya que pueden desencadenar o empeorar los síntomas vasomotores.
Debido a que la obesidad es un factor de riesgo para los sofocos, mantener un peso saludable a través de la dieta y el ejercicio juega un papel importante en la reducción de los sofocos. La ansiedad y los cambios de humor también pueden desencadenar sofocos, por lo que reducir el estrés y practicar la meditación pueden ser buenas formas de controlar, prevenir y aliviar los síntomas desagradables de los sofocos.
La Asociación Estadounidense del Corazón recomienda que las mujeres con antecedentes familiares de enfermedades cardíacas o que experimentan sofocos tempranos y severos deben controlar regularmente su salud y consultar con su médico sobre la necesidad de realizar pruebas de detección cardiovasculares.
[anuncio_2]
Fuente: https://giadinh.suckhoedoisong.vn/boc-hoa-man-kinh-dang-so-den-muc-nao-172241225180449275.htm
Kommentar (0)