Un niño de 10 años cultiva su pasión por la programación

Al compartir el secreto de sus excelentes resultados, Bao Khiem comentó con sencillez: “Es el resultado de casi un año de estudio constante, el apoyo de mi padre y el entusiasmo de mis profesores. Me presenté al examen en el grupo D1, cuyas preguntas abarcaban desarrollo de software, creación de videojuegos y ampliación de funcionalidades del producto. Durante la preparación, estudié principalmente en casa con mi padre, centrándome en la programación, la programación funcional y la creación de pequeños videojuegos. Los profesores me facilitaron exámenes de años anteriores para que pudiera consultarlos, practicar y familiarizarme con la estructura y los requisitos del examen real”.

Con el innovador software “Happy Learning Vietnamese Grade 1”, Khiem superó a numerosos competidores y ganó el primer premio a nivel nacional. En el reciente examen nacional, la prueba tenía una duración de 150 minutos y Khiem la terminó aproximadamente tres minutos antes del límite. Al recibir el examen, aunque estaba algo nervioso, mantuvo la calma leyéndolo con atención y guardando los resultados con regularidad para evitar problemas técnicos. Prestó especial atención a los puntos clave que determinaban el éxito en la prueba.

Bao Khiem recibió la guía y orientación de su padre durante la programación de un nuevo videojuego. Foto: PHUONG LAN

La pasión de Bao Khiem por la informática comenzó desde muy pequeño. Con tan solo 3 años, le fascinaban las películas de robots y soñaba con ser robótico. Su padre, el Sr. Tran Van Teo (nacido en 1983), residente en el barrio de Binh Duc, creó un software adecuado para que Khiem se familiarizara con la programación de control de robots entre los 5 y 6 años. Entre los 6 y 7 años, Khiem descubrió nuevos programas de programación por su cuenta. En tercer grado, participó por primera vez en la competencia provincial juvenil de informática, donde obtuvo el segundo premio. A partir de entonces, el deseo de superar retos de programación más complejos impulsó al joven estudiante a dedicar más tiempo a practicar cada día.

Ganar el primer premio en el grupo D1 de la Competencia Nacional Juvenil de Informática de 2025 (cuando aún cursaba cuarto grado) fue una gran motivación, que le brindó a Bao Khiem una alegría y un orgullo indescriptibles. En la competencia, la mayoría de los participantes estaban en quinto grado; solo unos pocos alumnos de cuarto, como Khiem, participaron. Sus padres siempre lo apoyaron, sin presionarlo, simplemente esperando que diera lo mejor de sí, porque creen que «con perseverancia, se puede lograr mucho». El padre de Bao Khiem, ingeniero de software que trabaja para una empresa en Estados Unidos, comentó que nunca obligó a su hijo a estudiar. La pasión de Bao Khiem surgió de su curiosidad natural al ver a su padre trabajar.

El Sr. Teo compartió: “Al reconocer el interés de mi hijo, creé las condiciones para que se familiarizara con la programación de una manera apropiada para su edad. Permitir que los niños aprendan a programar desde pequeños no solo les ayuda a desarrollar el pensamiento creativo y lógico, sino que también entrena su paciencia y sus habilidades para resolver problemas”. Bao Khiem también afirmó: “Aprender a programar es muy útil. Ser bueno programando me ayudará a resolver problemas matemáticos más rápido. Sueño con ir a Estados Unidos a estudiar y construir robots”.

Los juegos de Bao Khiem están diseñados sistemáticamente con funciones como lecciones, repaso, práctica y juegos sobre diversos temas, lo que le permite a él y a otros niños practicar habilidades de programación. En este camino, siempre cuenta con la compañía, la guía y el apoyo de su padre. Bao Khiem afirma que su pasión por la tecnología de la información se inspiró en su padre, pero que la exploración y el descubrimiento son fruto de su propia iniciativa.

La Sra. Pham Thi Kim Tuyen, tutora de Bao Khiem (4.º grado), comentó: “Bao Khiem ha sido un alumno excelente durante muchos años. Lo que más me impresiona de él es su educación, amabilidad y bondad. Khiem es inteligente y buen estudiante, pero no es arrogante; al contrario, es muy humilde. Si algún compañero necesita ayuda con sus estudios, Khiem se ofrece voluntario para ayudarle. Además, Khiem participa activamente en las actividades físicas y deportivas del colegio. El primer premio que obtuvo Bao Khiem en la Competencia Nacional Juvenil de Informática, Grupo D1, es un motivo de orgullo para él y para el colegio. Esperamos que siga cosechando éxitos y manteniendo este logro”.

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