El nuevo viaje del fundador de WikiLeaks

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El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, ha llegado a un acuerdo para poner fin a su detención en Gran Bretaña, lo que le permitirá regresar a su Australia natal y cerrar un viaje legal de más de una década.

Julian Assange, de 52 años, se declaró culpable de un cargo de conspiración para obtener y divulgar documentos clasificados de defensa de Estados Unidos, según una presentación judicial del 25 de junio. Assange ha sido liberado de la prisión de Belmarsh y ha abandonado el Reino Unido.

Con este acuerdo, el Sr. Assange comparecerá ante el tribunal en la isla de Saipán, en las Islas Marianas, territorio estadounidense del Pacífico , la mañana del 26 de junio y se espera que sea condenado a 62 meses de prisión. Los cinco años que el Sr. Assange pasó en prisión en el Reino Unido se contabilizarán para la sentencia, por lo que podrá regresar a Australia una vez finalizado el juicio.

Esta es la primera vez que el gobierno estadounidense intenta procesar a alguien por publicar secretos gubernamentales. Según Politico, el caso ha causado un gran dolor de cabeza diplomático al gobierno de Biden, que enfrenta presiones de Australia, un aliado clave en materia de seguridad.

Julian Assange, de 52 años, antes de salir del Reino Unido. Foto: Wikileaks

Julian Assange saltó a la fama con el lanzamiento de WikiLeaks en 2006, creando una plataforma en línea para denunciar irregularidades que permitía a las personas enviar documentos y vídeos clasificados de forma anónima. Según Al Jazeera, en 2010, WikiLeaks conmocionó al mundo al publicar cientos de miles de documentos militares estadounidenses clasificados relacionados con las guerras de Afganistán e Irak. Esta fue considerada la filtración de seguridad más grave en la historia del ejército estadounidense. Además de documentos militares, WikiLeaks también reveló una serie de cables diplomáticos sensibles.

Muchos han aclamado al Sr. Assange como un héroe por exponer irregularidades militares en Irak y Afganistán, pero otros han desestimado sus acciones, calificándolas de autobombo y de falta de comprensión del daño que puede causar la filtración de información. También ha enfrentado acusaciones de violación, que él ha negado sistemáticamente.

El acuerdo de culpabilidad de Assange no fue del todo inesperado, según los observadores. El presidente estadounidense, Joe Biden, ha estado bajo creciente presión para que retire el prolongado proceso contra Assange. El gobierno australiano presentó una solicitud formal en febrero, y Biden poco después declaró públicamente que estaba "considerando" la solicitud de Australia de retirar el procesamiento de Assange.

Desde hace años se lleva a cabo una campaña internacional para liberar a Assange, en la que participan celebridades y defensores de la libertad de prensa.

Según Jodie Ginsberg, directora ejecutiva del Comité para la Protección de los Periodistas, si Julian Assange es extraditado a Estados Unidos y procesado bajo la Ley de Espionaje, esto tendría un grave impacto en los periodistas de todo el mundo. El hecho de que Assange no sea ciudadano estadounidense, sino australiano, pero haya sido llevado a Estados Unidos y procesado, significa que los periodistas de cualquier lugar que intenten publicar información sobre abusos de derechos humanos, como ha hecho WikiLeaks, podrían ser perseguidos y procesados como lo ha hecho Estados Unidos con Assange.

El acuerdo pondría fin a una larga saga legal. En total, Assange ha pasado más de una década luchando contra la extradición (cinco años en la prisión de Belmarsh, a las afueras de Londres, y siete años en la embajada de Ecuador en Londres).

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