El viceprimer ministro de Camboya dijo que la victoria sobre Pol Pot con la ayuda de Vietnam puso fin a una era amarga y abrió una nueva era para el país.
El Sr. Neth Savoeun afirmó que la victoria del 7 de enero «puso fin a una época amarga y abrió un período de resurgimiento para Camboya», y expresó su gratitud por la ayuda de los soldados voluntarios vietnamitas que derramaron sangre y se sacrificaron para derrocar el régimen genocida de Pol Pot. Enfatizó que sin esa victoria, «la Camboya actual no existiría».
El viceprimer ministro camboyano, Neth Savoeun, habla en la ceremonia para celebrar el 45.º aniversario de la victoria en la guerra para proteger la frontera suroeste de la Patria y la victoria del ejército y el pueblo camboyanos sobre el régimen genocida. Foto: VNA
El viceprimer ministro vietnamita, Le Minh Khai, también calificó esto como una victoria común de los pueblos de los dos países, que contribuye a proteger firmemente la independencia, la soberanía y la integridad territorial de las dos naciones, cierra la página más oscura de la historia de Camboya y salva al pueblo camboyano del desastre del genocidio.
Después de tomar el poder en abril de 1975, el grupo de Pol Pot aprovechó los logros revolucionarios, traicionó al pueblo y estableció la Kampuchea Democrática, implementando un régimen genocida, conduciendo a Camboya a un terrible desastre sin precedentes en la historia.
El grupo de Pol Pot no sólo cometió crímenes brutales en el país, sino que también movilizó la mayor parte de su fuerza militar principal para invadir la frontera suroeste, violando gravemente la independencia, la soberanía y la integridad territorial de Vietnam, además de distorsionar la historia, incitar al odio y pisotear los buenos valores de la tradicional amistad vecinal entre Vietnam y Camboya, según el viceprimer ministro Le Minh Khai.
El viceprimer ministro Le Minh Khai habla en el evento celebrado esta mañana en Hanói. Foto: VNA
En respuesta al llamado del Frente Unido Nacional de Camboya para la Salvación Nacional, Vietnam ejerció su legítimo derecho a la autodefensa, detuvo la invasión de la frontera sudoeste y ayudó a las fuerzas armadas revolucionarias camboyanas a liberar a la nación del genocidio.
Tras el derrocamiento del régimen de Pol Pot, Vietnam envió numerosas delegaciones de funcionarios y expertos a Camboya para apoyar la construcción de un gobierno de base y la recuperación socioeconómica. Para 1989, Vietnam había retirado todas sus tropas voluntarias de Camboya, según el acuerdo entre ambos países, cumpliendo así una noble y pura obligación internacional, excepcional en la historia de las relaciones internacionales.
"Podemos afirmar con certeza que Camboya y Vietnam son el epítome de las mejores relaciones de vecindad del mundo, demostrando bondad, hermandad, amistad y lealtad", afirmó el viceprimer ministro Neth Savoeun.
Durante su visita a Vietnam en diciembre pasado, el Primer Ministro Hun Manet también valoró altamente la relación Vietnam-Camboya cada vez más consolidada y desarrollada en todos los campos, afirmando que Camboya trabajará con Vietnam para proteger, preservar y nutrir la relación entre los dos países para continuar desarrollándola a nuevas alturas y transmitirla a las generaciones futuras.
Thanh Tam
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