La Reserva Federal recortará los tipos de interés por segunda vez en 2025.

Al mismo tiempo, la Reserva Federal también anunció que reanudaría las compras limitadas de bonos del gobierno estadounidense, después de que el mercado monetario mostrara signos de iliquidez, una situación que la Reserva Federal había dicho que trataría de evitar.

La Reserva Federal recortó los tipos de interés por segunda vez en 2025.

Con una votación de 10 a 2, la Reserva Federal redujo su tasa de interés clave a un rango de entre el 3,75% y el 4,00%, lo que representa el segundo recorte de tasas en lo que va del año, tal como anticipaban los inversores. Esta medida se interpreta como un intento por prevenir un mayor debilitamiento del mercado laboral, una preocupación creciente dentro de la Reserva Federal.

La decisión de la Reserva Federal se produce en medio de un cierre del gobierno que ha llevado a la propia Reserva Federal a admitir dificultades para acceder a la totalidad de los datos económicos . El banco se ve obligado a basarse en las cifras de desempleo de agosto de 2025, el informe oficial de empleo más reciente.

Sin embargo, la Reserva Federal afirmó que los indicadores actuales siguen mostrando que la economía estadounidense está creciendo a un ritmo moderado.

La decisión de recortar los tipos de interés también estuvo acompañada de dos opiniones opuestas: el gobernador Stephen Miran afirmó que los tipos de interés deberían recortarse más drásticamente para apoyar el crecimiento, mientras que el presidente de la Reserva Federal de Kansas City, Jeffrey Schmid, se opuso al recorte debido a la preocupación por la persistente alta inflación.

Las disidencias del Sr. Miran y del Sr. Schmid también marcaron la tercera vez desde 1990 que la Reserva Federal tuvo puntos de vista opuestos —un bando que quería más flexibilización, el otro que quería un endurecimiento— en la misma reunión de política monetaria.

Según el anuncio, a partir del 1 de diciembre, la Reserva Federal mantendrá el tamaño total de su balance mensualmente, pero ajustará la estructura de la cartera reinvirtiendo los ingresos procedentes del vencimiento de los bonos respaldados por hipotecas (MBS) en letras del gobierno a corto plazo.

Inmediatamente después de la decisión, los índices bursátiles estadounidenses mantuvieron un ligero aumento, mientras que los rendimientos de los bonos del gobierno (que se mueven de forma inversa a los precios) subieron simultáneamente. Los inversores siguen apostando a que la Reserva Federal volverá a recortar los tipos de interés en su reunión de diciembre, y que podría flexibilizar aún más la política monetaria en marzo de 2026.

La inflación tampoco aumentó tan bruscamente como se predijo inicialmente después de que la administración Trump impusiera nuevos aranceles a las importaciones, pero aun así subió ligeramente de alrededor del 2,3% en abril de 2025 al 2,7% en agosto de 2025, según el último índice de precios de gastos de consumo personal (PCE) publicado antes del cierre del gobierno.

La Reserva Federal utiliza el PCE como su medida clave para establecer su objetivo de inflación del 2%, y en sus previsiones de septiembre, los responsables políticos proyectaron que el índice podría alcanzar el 3% a finales de año.

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