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| Reunión con la Universidad Binh Duong para coordinar la formación de un equipo de robótica para estudiantes de primaria y secundaria de la comuna de Thien Hung, provincia de Dong Nai. Foto: Binh An |
Cuando los "planes de lecciones modelo" ya no son suficientes para la nueva era
En el pasado, durante muchos años, la enseñanza universitaria se estandarizó mediante «planes de clase modelo»: desde los objetivos, los métodos y el contenido hasta la evaluación, todo se especificaba al detalle. Este método ayudaba a controlar la calidad de la formación en un contexto de tecnología limitada. Pero ahora, con el rápido desarrollo de la IA, el modelo de «un plan de clase para diez mil clases» ha quedado obsoleto.
Los tiempos cambiantes exigen que los docentes abandonen el modelo de transmisión unidireccional y se conviertan en organizadores, diseñadores y guías de experiencias de aprendizaje digital para los estudiantes. En este entorno, los estudiantes no solo reciben conocimientos, sino que también exploran , debaten, crean y generan activamente sus propios productos de aprendizaje mediante la tecnología. Este cambio de la "transmisión" a la "creación de experiencias" es la expresión más clara de la capacidad pedagógica en la era de la IA, donde la planificación de la clase ya no es un plan rígido, sino un espacio abierto para que el pensamiento, las emociones y la creatividad se desarrollen conjuntamente. De ser "proveedores de conocimiento", los docentes se han convertido en "arquitectos del aprendizaje digital", coordinadores del saber entre humanos y máquinas de aprendizaje, entre emociones reales y datos virtuales.
Resolución 71: un impulso para el pensamiento educativo digital
La Resolución N° 71-NQ/TW sobre avances en el desarrollo de la educación y la formación en el nuevo período enfatizó: «Transformación digital integral, popularización y sólida aplicación de la tecnología digital y la inteligencia artificial en la educación y la formación». Posteriormente, el 15 de septiembre de 2025, el Gobierno emitió la Resolución N° 281/NQ-CP sobre el Programa de Acción para la implementación de la Resolución 71, institucionalizando la hoja de ruta de implementación para cada nivel educativo y haciendo hincapié en el desarrollo de la competencia digital del personal docente.
Según el Ministerio de Educación y Formación, el curso escolar 2025-2026 se identifica como el "año de la transformación digital integral", estrechamente vinculado a tres pilares: Educación abierta y aprendizaje permanente; Aplicación de la IA en la gestión educativa y la evaluación de la calidad; Desarrollo de la capacidad digital de docentes y estudiantes.
«La IA no es solo una herramienta, sino una solución revolucionaria que abre una nueva perspectiva sobre la educación», afirmó el viceministro de Educación y Formación, Nguyen Van Phuc. Según él, cuando la IA interviene en cada etapa —desde el diseño de las clases y la evaluación de competencias hasta el apoyo a la investigación— el papel del profesorado debe elevarse a un nuevo nivel: el de guía en el mundo digital.
Competencia digital: el nuevo fundamento de la profesión docente
Según los expertos, la competencia digital del profesorado no se limita al manejo de software o herramientas de IA. Se trata de un conjunto de competencias integradas, que incluyen: Competencia tecnológica: dominio de herramientas digitales, plataformas de enseñanza en línea, software de simulación e IA para el aprendizaje; Competencia pedagógica digital: diseño de experiencias de aprendizaje multimedia y personalización de itinerarios formativos para cada estudiante; Competencia en el manejo de datos: capacidad para analizar y aprovechar los datos de aprendizaje con el fin de responder y ajustar los métodos de enseñanza; Competencia ética digital: protección de la privacidad, prevención del abuso de la IA y garantía de la humanidad en la educación. En otras palabras, la «competencia digital» es una combinación de conocimientos, habilidades y actitudes, un nuevo estándar profesional al que todo el profesorado debe aspirar.
Nadie puede seguir enseñando a la generación de estudiantes que crecieron con ChatGPT, Copilot o plataformas de aprendizaje inteligente con planes de lecciones de la época de la tiza y la pizarra.
El maestro Nguyen Thanh Son, director del Instituto de Inteligencia Artificial y Transformación Digital de la Universidad Binh Duong, compartió: "Cuando la IA pueda calificar trabajos, crear preguntas e incluso preparar clases, el papel de los profesores ya no será reemplazar a la máquina, sino trabajar con ella: guiar a los estudiantes para que utilicen la IA de manera responsable, creativa y humana".
Lecciones de modelos pioneros
Sin esperar a la publicación de la Resolución 71, muchas universidades nacionales han comenzado a probar modelos de IA en la docencia. En la Universidad Nacional de Ciudad Ho Chi Minh, la implementación piloto del sistema «Mentor de IA» permite a los estudiantes formular y responder preguntas, revisar el contenido de las lecciones y recibir retroalimentación automática. Los docentes pueden monitorear el progreso de cada estudiante a través del panel de control, lo que les permite intervenir rápidamente con aquellos que tienen dificultades o que no han participado lo suficiente en las actividades de aprendizaje. En la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hanói, el software de «Calificación de tesis con IA» ayuda a los docentes a ahorrar un 40 % del tiempo dedicado a la lectura y la crítica preliminar, mientras que los estudiantes reciben una retroalimentación más objetiva, rápida y detallada.
Mientras tanto, la Universidad Binh Duong, una de las primeras instituciones educativas del sudeste asiático en implementar el programa "Profesor Digital - Estudiante Inteligente", ha incorporado la IA para guiar a los estudiantes en la realización de proyectos, el diseño de productos y la presentación de trabajos utilizando herramientas de IA. Los profesores actúan como asesores, ayudando a los alumnos a comprender que la IA solo es inteligente cuando los usuarios saben formular preguntas inteligentes.
Las oportunidades traen consigo desafíos.
Las oportunidades son enormes, pero también existen importantes desafíos. Según una encuesta del Ministerio de Educación y Formación (2025), solo alrededor del 35 % del profesorado universitario cuenta actualmente con formación en competencias digitales; la mayoría aún se muestra confundida al aplicar la IA para diseñar materiales didácticos o evaluar los resultados del aprendizaje. A muchos docentes les preocupa que la IA, al «redactar las lecciones» o «resolver las preguntas» por ellos, fomente la pereza intelectual en el alumnado; o temen que la tecnología sustituya su función en el futuro.
Por lo tanto, para evitar la brecha digital en el profesorado, muchas instituciones educativas han implementado programas de capacitación en competencias digitales: desde el uso de la inteligencia artificial en la docencia y la creación de contenido para videoconferencias, hasta la gestión de aulas virtuales y la seguridad de los datos estudiantiles. Además, se requiere innovar los estándares profesionales del profesorado, donde la competencia digital debe ser un criterio obligatorio para la asignación de cargos, ascensos y la evaluación de la eficacia docente.
Innovar en la concepción de la formación para que los docentes no se queden atrás.
La realidad es que si el programa de formación docente mantiene el enfoque tradicional, incluso con cientos de resoluciones, la transformación digital seguirá siendo solo una realidad. Por lo tanto, las instituciones pedagógicas deben liderar la reestructuración del programa de formación: integrando módulos de IA en la educación, diseño de aprendizaje digital y ética tecnológica; reforzando los módulos prácticos con herramientas como ChatGPT, Copilot, Khanmigo y ClassPoint AI, para que los estudiantes de pedagogía puedan experimentar el rol de docentes digitales desde sus primeros años de estudio; y fomentando la cooperación con empresas tecnológicas para desarrollar un ecosistema de aprendizaje abierto. Además, se requiere una sólida política de inversión en infraestructura tecnológica, el sistema nacional de datos educativos y, especialmente, una política que impulse la innovación en la enseñanza para que los docentes se atrevan a experimentar, a aprender de sus errores y a innovar.
Cuando el maestro regresa a su verdadero significado: el de guía del conocimiento.
La IA está generando una «revolución silenciosa» en la educación. Pero la esencia de la educación, como siempre, sigue siendo humana. La IA puede ayudar a los docentes a enseñar con mayor rapidez y eficacia, pero solo los docentes pueden enseñar a las personas a vivir con humanidad, a amar el conocimiento y a ser ellas mismas. En la era digital, el papel del docente no desaparece, sino que cobra mayor relevancia que nunca: guía en el laberinto de datos, fuente de inspiración para el aprendizaje, quien mantiene viva la conexión humana en el frío mundo de las máquinas.
Las resoluciones 71-NQ/TW y 281/NQ-CP han abierto una nueva perspectiva para la educación vietnamita en la era de la IA. Sin embargo, para que esta perspectiva se materialice, lo más importante no es la tecnología, sino las personas, especialmente el profesorado. En la era de la IA, los docentes necesitan más que nunca competencias digitales, pensamiento innovador y humanidad. Porque son ellos, y no ningún algoritmo, quienes forjan una generación de ciudadanos digitales con inteligencia, valentía y responsabilidad: las personas que integrarán al país en una nueva era de conocimiento y creatividad.
Tu Huu Cong
Fuente: https://baodongnai.com.vn/xa-hoi/giao-duc/202511/giang-vien-thoi-dai-ai-can-nang-luc-so-hon-la-giao-an-mau-07f0505/







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