El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, declaró la semana pasada un estado de emergencia de 60 días, que incluye un toque de queda nocturno y la designación de 22 grupos criminales como terroristas.
Los actos de violencia recientes incluyeron ataques de hombres armados a un programa de televisión en vivo, varias explosiones en ciudades y el secuestro de personal penitenciario en aparente respuesta a la ofensiva del Sr. Noboa contra el crimen.
Fuerzas de seguridad ecuatorianas inspeccionan un área cercana a la cárcel Zonal 8, donde el líder de la banda, Fito, desapareció a principios de mes. Foto: Reuters
El SNAI indicó en un comunicado el lunes que los reclusos escaparon de una prisión en Esmeraldas, una ciudad cercana a la frontera con Colombia, luego de que unos 2.000 miembros de las fuerzas de seguridad ecuatorianas realizaron un operativo de búsqueda en la prisión el domingo.
Según el gobierno ecuatoriano, desde que se declaró el estado de excepción, las fuerzas de seguridad han detenido a más de 1.500 personas y realizado 41 operativos contra grupos terroristas y bandas criminales.
El gobierno ecuatoriano dijo en un comunicado separado que las operaciones continuarían en todo Ecuador esta semana: “El objetivo declarado es claro: tolerancia cero con los terroristas y abusadores de la población”.
El presidente Noboa fue elegido a finales del año pasado con la promesa de restaurar la seguridad. Prometió recluir a los líderes de pandillas en cárceles de alta seguridad, entre otras medidas, para combatir la violencia rampante del país.
Mai Van (según Reuters, CNA)
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