La guerra terminó hace casi medio siglo, pero el dolor del Agente Naranja sigue presente en la vida cotidiana de más de 1.000 personas de la provincia. A lo largo de los años, junto con todos los niveles y sectores, la Asociación Provincial de Víctimas del Agente Naranja/Dioxina siempre ha prestado atención a la vida material y espiritual de las víctimas, ayudándolas a superar las dificultades y a salir adelante con confianza.
El Sr. Nguyen Hong Quan, presidente de la Asociación Provincial de Víctimas del Agente Naranja/Dioxina, declaró: «Establecida en abril de 2018, la Asociación cuenta actualmente con nueve sucursales en distritos y ciudades, con 457 miembros. Con el lema «Solidaridad, Amor y Responsabilidad por las Víctimas del Agente Naranja», la Asociación se encarga de cuidar y proteger los derechos de las víctimas del Agente Naranja/Dioxina y de representar legalmente a sus miembros ante organizaciones e individuos dentro y fuera de la provincia; recibe financiación y apoyo de organizaciones e individuos para ayudar a sus miembros a estabilizar sus vidas».
Actualmente, el 100% de los miembros reciben subsidios mensuales, de los cuales 281 están directamente expuestos y 173 son hijos de combatientes de la resistencia infectados. Además, la Asociación se ha coordinado con la Asociación Provincial de Veteranos para evaluar y comprender las condiciones de vida de los miembros. Durante los días festivos, todos los niveles, sectores, sindicatos, organizaciones e individuos han organizado visitas y entregado obsequios para ayudar a las familias de los miembros, especialmente a aquellas en circunstancias difíciles. Desde 2018 hasta la fecha, agencias, unidades, empresas y filántropos han apoyado la construcción y reparación de numerosas viviendas para los miembros; han proporcionado sillas de ruedas, ropa de abrigo, otorgado becas y visitado a los miembros cuando estaban enfermos, con un costo total de 1.400 millones de VND. En particular, la Asociación Central de Víctimas del Agente Naranja apoyó la construcción y reparación de siete casas de agradecimiento, donó 75 obsequios, 45 sillas de ruedas y dos becas, en el marco del proyecto "Semillas de Esperanza", apoyado por el Fondo para las Víctimas del Agente Naranja de Vietnam, con un costo total de 218 millones de VND.
Entre 1973 y 1974, el Sr. Lo Van Quoc, de la aldea Thai Cong, comuna de Phong Lang, distrito de Thuan Chau, participó en la guerra en el sur y se contagió del Agente Naranja. Durante las últimas décadas, ha sufrido las secuelas de las sustancias químicas tóxicas. El Sr. Quoc compartió: «Tengo un hijo con discapacidad intelectual congénita debido a los efectos de las sustancias químicas tóxicas. Recibo un subsidio mensual de más de 2 millones de dongs, y mi hijo recibe 1,6 millones de dongs. Además, durante las festividades y el Tet, el Comité del Partido y el gobierno me cuidan, me animan, me visitan y me dan regalos, lo que me fortalece para superar las dificultades».
Actualmente, en el distrito de Yen Chau, hay 74 víctimas del Agente Naranja/dioxina, de las cuales 49 estuvieron expuestas directamente y 25 indirectamente. El Sr. Nguyen Quy Don, director de la Asociación Distrital de Víctimas del Agente Naranja/dioxina, informó: «Establecida en 2020, la Asociación es un espacio para que los miembros se reúnan, compartan y se animen mutuamente a superar el dolor. Cada año, además de organizar actividades para visitar y animar a los miembros cuando están enfermos, entregar regalos en días festivos y el Tet, la Asociación también ayuda a los miembros en circunstancias difíciles a desarrollar la economía , orientar la aplicación de avances técnicos en la producción, ayudar a las familias de los miembros a aumentar sus ingresos y mejorar sus vidas».
Sin embargo, la solución de los regímenes para las víctimas del Agente Naranja todavía enfrenta dificultades debido a la falta de documentos o la pérdida de documentos originales; los costos operativos dependen enteramente de fuentes de financiación movilizadas, del apoyo de unidades, de filántropos... Por lo tanto, la Asociación espera que todos los niveles, sectores y localidades presten atención a asegurar los costos operativos de la Asociación; la comunidad social seguirá apoyando y ayudando a las víctimas de productos químicos tóxicos, dándoles más fuerza para superar el dolor y levantarse en la vida.
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