RT informó el 3 de diciembre que la Comisión Europea y el Parlamento Europeo acordaron dejar de importar gas de Rusia en 2027, a pesar de la oposición de algunos estados miembros de la Unión Europea (UE) que dijeron que el plan conduciría a mayores costos de la energía.
Según un comunicado europeo emitido el 3 de diciembre, los contratos a corto plazo finalizarán en junio de 2026 y todos los contratos a largo plazo restantes finalizarán a finales de 2027. La prohibición de las importaciones de gas ruso y GNL bajo nuevos contratos entrará en vigor a partir del 1 de enero de 2026. Las importaciones de gasoducto bajo contratos a largo plazo deben finalizar el 30 de septiembre de 2027, con posibilidad de prórrogas a corto plazo si hay necesidad de reservas.

«Este es un buen día para Europa y para nuestra independencia de los combustibles fósiles rusos. Así es como logramos que Europa sea resiliente», declaró la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Varios países de la UE, entre ellos Hungría y Eslovaquia, han criticado el plan, alegando que elevaría los precios y socavaría la seguridad energética. Hungría y Eslovaquia se han negado a apoyar la iniciativa y planean presentar objeciones legales, alegando su situación geográfica sin litoral y su dependencia del gasoducto.
El ministro de Asuntos Exteriores húngaro, Peter Szijjarto, declaró que Budapest no puede aceptar ni implementar la decisión de la UE de suspender las importaciones de energía de Rusia. Aseguró que el plan no es viable para Hungría y que apelará ante el Tribunal Supremo de la UE.
Tras el anuncio europeo, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que la UE se volvería dependiente de "gas que cuesta significativamente más que el gas ruso", advirtiendo que los mayores costos de la energía debilitarían aún más la competitividad de la economía de la UE y acelerarían la erosión de su potencial económico.
Los precios de la energía en la UE se han disparado desde que el bloque comenzó a eliminar gradualmente el petróleo y el gas rusos después de que el conflicto de Ucrania se intensificara en febrero de 2022. Las interrupciones del suministro han elevado los costos industriales, y Moscú argumenta que las naciones occidentales están dañando sus propias economías al optar por alternativas más caras y menos confiables.
>>> Se invita a los lectores a ver más vídeos sobre el progreso de las negociaciones sobre el plan de paz de Ucrania.
Fuente: https://khoahocdoisong.vn/chau-au-se-ngung-nhap-khau-khi-dot-cua-nga-moscow-phan-ung-sao-post2149073535.html






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