Con una remontada extraordinaria ante Tailandia, la selección vietnamita de Sepak Takraw ganó el campeonato mundial por tercera vez.

La selección femenina vietnamita tuvo que competir en el extranjero, por lo que enfrentó muchas dificultades. Ambos equipos se volvieron a encontrar en el contexto del deseo de Tailandia de "vengarse" tras la derrota sufrida en la Copa Mundial de Sepak Takraw en marzo pasado. La ventaja de jugar en casa y el buen ánimo hicieron que Tailandia llegara al partido con la moral por las nubes. Derrotaron a la selección femenina vietnamita en el primer set por 15-12.

Ante las dificultades, los jugadores demostraron valentía y tenacidad. El equipo recuperó cada punto con calma y ganó contundentemente el segundo partido. En ese momento, el marcador era 1-1 y ambos equipos se preparaban para el partido decisivo.

En los primeros saques, Tailandia recuperó el ánimo y se puso 5-2 arriba. Pero de repente perdió el control, creando una oportunidad para que Vietnam anotara 6 puntos consecutivos y se pusiera 8-5 arriba. En ese momento, el entrenador tailandés pidió consejo, pero ya era demasiado tarde. Siguieron cometiendo errores al sacar, y esa fue la oportunidad para que Vietnam ganara.

En una situación crucial, el jugador tailandés no logró enviar el balón por encima de la red. El marcador del tercer set quedó en 15-7. En el otro lado de la cancha, los jugadores vietnamitas se abrazaron y celebraron en el silencio del Estadio Central Hatyai, repleto de aficionados locales.

El partido finalizó con un marcador de 2-1 a favor de la selección femenina vietnamita, lo que les permitió ganar el Campeonato Mundial de Sepak Takraw por tercera vez, todas ellas con la categoría femenina de 4 personas. La primera vez fue en 2022, cuando el equipo también ganó contra Tailandia.