Debido a la división política en Libia, las partes aún no han logrado ponerse de acuerdo sobre las cifras oficiales de víctimas. Sin embargo, funcionarios de Derna estiman que el número de muertos podría ser mucho mayor de lo anunciado, según informó AP.
La tormenta Daniel azotó la costa libia el 10 de septiembre. Los residentes de Derna informaron haber escuchado una fuerte explosión al derrumbarse dos presas en las afueras de la ciudad. Las aguas de la inundación se precipitaron por Wadi Derna, un valle que atraviesa la ciudad, destruyendo edificios y arrastrando personas y viviendas al mar.
Una zona dañada por la tormenta en Derna
Marie el-Drese, jefa de la Media Luna Roja Libia, añadió que 10.100 personas estaban desaparecidas en el desastre.
Mientras que el gobierno reconocido internacionalmente en la capital, Trípoli, ha asignado el equivalente a 412 millones de dólares para reconstruir Derna y otras ciudades del este, la oposición oriental está coordinando los esfuerzos de ayuda.
Derna ha comenzado a enterrar a los muertos, principalmente en fosas comunes, según Othman Abduljaleel, director de la autoridad sanitaria del este. Derna se encuentra bajo el régimen de la oposición libia.
Muchos edificios de Derna fueron arrastrados por las aguas de la inundación al mar.
Más de 3.000 cuerpos habían sido enterrados hasta la mañana del lunes, y otros 2.000 aún se estaban procesando, según Abduljaleel. La mayoría de los muertos fueron enterrados en fosas comunes a las afueras de Derna, mientras que otros fueron trasladados a pueblos y ciudades cercanas, añadió. Los equipos de rescate seguían revisando los edificios del centro de la ciudad, mientras que los buzos rastreaban las aguas de Derna en busca de cuerpos.
Tras recibir una petición de ayuda desde Derna, el Comité Internacional de la Cruz Roja proporcionó 6.000 bolsas para cadáveres, así como medicamentos, alimentos y otros materiales de ayuda para que las autoridades los distribuyeran entre los residentes y los equipos de rescate.
Los equipos de rescate todavía tienen dificultades para trasladar equipo pesado a las zonas afectadas debido a que las fuertes lluvias e inundaciones han bloqueado las carreteras de la zona.
Reuters citó al director de la Organización Meteorológica Mundial, Petteri Taalas, quien declaró el 14 de septiembre que la mayoría de las víctimas eran evitables. "Si el servicio meteorológico hubiera funcionado con normalidad, podría haber emitido alertas. Los servicios de emergencia podrían haber llevado a cabo evacuaciones", declaró Taalas.
En respuesta a la declaración, el gobierno libio ha iniciado una investigación para ver si algún factor humano contribuyó al peor desastre natural en la historia moderna del país.
Mohamed al-Menfi, presidente del Consejo Presidencial Libio, anunció en X (anteriormente Twitter) que el consejo había solicitado al fiscal general que investigara el desastre. Según él, los implicados en el colapso de la presa deben rendir cuentas.
[anuncio_2]
Enlace de origen
Kommentar (0)