Para muchos australianos, Vietnam es conocido por la belleza de la bahía de Ha Long, Hanói y Ciudad Ho Chi Minh. Pero Vietnam tiene mucho más que ofrecer, incluyendo una gama de excelentes habilidades para la vida que los australianos deberían aprender.
Después de una semana en Vietnam, James Booth descubrió que había cosas que creía que los vietnamitas hacían mejor que los australianos.
James Booth comió comida vietnamita y disfrutó de un café con huevo en Hanoi.
Conducir
Al salir de Sídney, escapando del caos tóxico de los bocinazos y la furia al volante por las infracciones más pequeñas, es reconfortante ver que, en Vietnam, tocar la bocina no significa necesariamente estar enojado. Es simplemente una forma de comunicar "Estoy aquí" (o "Quítate, no voy a ceder el paso"). Las bocinas de las motos en Vietnam son como el sonido en braille.
Aunque los australianos a menudo dicen clichés como "No hay leyes de tránsito en el sudeste asiático" y actúan como si nuestro sistema de tránsito vial fuera inherentemente mucho mejor, yo diría que aprender a conducir en Vietnam en realidad te ayudará a convertirte en un conductor más informado y responsable.
Comer y beber
Crecí comiendo pechuga de pollo, y la idea de comer patas de pollo me daba náuseas. Sin embargo, queriendo impresionar a mis amigos, lo probé, y no fue tan horrible como pensaba.
Este es solo un ejemplo de las muchas maneras en que los vietnamitas desperdician menos (y son más creativos) en su arte culinario en comparación con los australianos. Otros ingredientes, como la anguila, las vísceras de pescado, los caracoles marinos, las orejas de cerdo, etc., también son muy atractivos.
Además, noté que los vietnamitas comen menos comida rápida. Por ejemplo, nuestro guía turístico comentó que comprar productos locales frescos en los mercados tradicionales es más barato que comprarlos en los supermercados.
Por lo tanto, comía felizmente tres veces al día porque la comida era muy fresca y nutritiva (a diferencia de la dieta de alimentos procesados que tenía en casa). Y me sentía más saludable que nunca.
Siesta
Mientras que los australianos a menudo se quejan de lo incómodo de los asientos de la clase ejecutiva, en Vietnam la gente parece perfectamente cómoda tumbada en cualquier lugar, desde los asientos de las motocicletas (usando el manillar como reposacabezas) hasta los bancos del parque, los rickshaws y, por supuesto, las hamacas para descansar unos minutos al mediodía.
Café
Olvídate de añadir mantequilla a tu café matutino como un loco entrenador estadounidense practicando ayuno intermitente; el café vietnamita con huevo es la mejor opción. Se prepara con café negro, leche condensada y yemas de huevo batidas para crear una bebida única.
"Vive el momento"
Olvídate de tomar una clase de yoga en Bali o de hacer tres meses de meditación Vipassana en la India. Tan solo cruzar una calle en Hanói te permitirá vivir el momento más que nunca. Cruzar la calle en las principales ciudades del país también es una habilidad.
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