La historia detrás del humo blanco

Sin embargo, los cigarrillos electrónicos no son tan simples como parecen: tienen innumerables efectos nocivos que los usuarios desconocen.

El primer efecto nocivo es la adicción. Según S., se empieza a depender del cartucho cada vez que se necesita concentrarse. De igual forma, se usa para aliviar el estrés o satisfacer los antojos. Este es uno de los primeros signos de adicción a los cigarrillos electrónicos. Según la Alianza para el Control del Tabaco del Sudeste Asiático (SEATCA), la mayoría de los cigarrillos electrónicos contienen nicotina, una sustancia altamente adictiva. Aunque la cantidad en los cartuchos o vapeadores es menor que en los cigarrillos tradicionales, esta sustancia sigue causando adicción, especialmente con el uso prolongado. Los cigarrillos electrónicos causan tantas enfermedades como los cigarrillos tradicionales.

Además de los pulmones, que se ven directamente afectados, los cigarrillos electrónicos también causan numerosas enfermedades relacionadas con el cerebro, el sistema cardiovascular y el sistema inmunitario. En el cerebro, la nicotina de los cigarrillos electrónicos libera sustancias químicas que producen una sensación de bienestar, lo que provoca cambios químicos duraderos y, lo más peligroso, adicción. Además, los usuarios pueden experimentar dolores de cabeza, mareos o temblores.

Para los estudiantes, el uso de cigarrillos electrónicos tiene un impacto directo y a largo plazo en las regiones cerebrales, en particular en la corteza prefrontal, un área que se desarrolla rápidamente durante la secundaria y la preparatoria. Estas regiones cerebrales procesan la cognición y las emociones, la motivación, la capacidad de planificación y la capacidad de atención. Por lo tanto, los jóvenes suelen presentar una atención y concentración reducidas, poca capacidad para tomar decisiones, cambios de personalidad, comportamiento errático y un deterioro significativo en el rendimiento académico.

En cuanto a la salud cardiovascular, tras usar cigarrillos electrónicos, la frecuencia cardíaca y la presión arterial aumentan drásticamente, lo que obliga al corazón a esforzarse más para suministrar suficiente sangre y oxígeno a las células. A largo plazo, los usuarios se exponen al riesgo de sufrir infartos y accidentes cerebrovasculares. En cuanto al sistema inmunitario, un estudio demostró que los cigarrillos electrónicos desactivan cientos de genes inmunitarios clave, dañándolo incluso más que el tabaco tradicional.

Los cigarrillos electrónicos también tienen un impacto significativo en quienes los rodean. En los niños, la nicotina presente en los cigarrillos electrónicos perjudica el desarrollo cerebral y puede causar deterioro de la memoria. En las mujeres embarazadas, la nicotina también afecta negativamente la salud de la madre y del feto durante el embarazo, causando parto prematuro y muerte fetal.

Fuente: https://baoquocte.vn/thuoc-la-dien-tu-cau-chuyen-dang-sau-lan-khoi-trang-229828.html