'Fuga de cerebros inversa' de Estados Unidos a China

Los expertos dicen que esta tendencia puede continuar a medida que Washington recorta los presupuestos de investigación y refuerza el control sobre el talento extranjero, mientras que Beijing acelera la inversión en innovación nacional.

El fenómeno de la «fuga de cerebros inversa» genera inquietud sobre la capacidad a largo plazo de Estados Unidos para mantener su atractivo científico global. Esto también podría afectar directamente la competencia entre ambas potencias en áreas estratégicas como la inteligencia artificial, los semiconductores, la biotecnología o la computación cuántica.

Durante años, China ha seguido una estrategia persistente para atraer talento global, especialmente científicos de origen chino que han estudiado y trabajado en el extranjero. Ahora, mientras la administración Trump presiona para recortar los presupuestos de investigación, aumentar el precio de las visas H1-B y reforzar la supervisión de las universidades, Pekín ve esto como una "oportunidad de oro" para atraer talento.

Un “cazador” de talentos en China también reveló que el número de solicitudes para programas de patrocinio gubernamental ha aumentado significativamente desde que Estados Unidos endureció su política de visas.

Por otro lado, muchos científicos que han trabajado durante mucho tiempo en Estados Unidos también están regresando a China. El profesor Lu Wuyuan, quien actualmente trabaja en la Universidad de Fudan y fue profesor de la Universidad de Maryland (EE. UU.), afirmó: «Hay un claro aumento en el número de solicitantes de empleo extranjeros. Esta es una tendencia fuerte y probablemente irreversible».

No solo prestigiosos institutos de investigación, sino también numerosas universidades chinas anuncian abiertamente invitaciones para académicos internacionales, con atractivos incentivos como becas de investigación, bonificaciones, alojamiento y apoyo familiar. Estos programas suelen estar vinculados al fondo central para jóvenes talentos destacados, como parte de la estrategia de desarrollo de talento a largo plazo de Pekín.

Estos esfuerzos se producen en un contexto de rápido crecimiento del poder científico de China. El país ha alcanzado logros significativos, como traer la primera muestra de la cara oculta de la Luna, liderar el camino en energías renovables y comunicaciones cuánticas, y desarrollar misiles hipersónicos. Recientemente, la startup tecnológica DeepSeek también ha llamado la atención con un chatbot que, según se dice, es comparable al modelo de OpenAI, pero a un coste mucho menor.

Según Nature Index, los científicos chinos publican más artículos de investigación en revistas de ciencias naturales y salud que los estadounidenses. Universidades como Tsinghua, Pekín y Fudan también figuran entre las 50 mejores del mundo .

Sin embargo, los expertos afirman que China aún tiene un largo camino por recorrer para convertirse en una potencia científica líder. Por ejemplo, el entorno político y la calidad de vida siguen siendo factores que muchos científicos consideran antes de decidir abandonar Estados Unidos.

El profesor Yu Xie, de la Universidad de Princeton (EE. UU.), comentó: «Las universidades chinas ven los cambios en Estados Unidos como un beneficio. Están ampliando sus programas de investigación y formación en todos los campos».

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