Por un crecimiento sostenible con aspiraciones de llegar lejos

La sólida recuperación de la producción, el consumo y el comercio no sólo crea impulso para que el crecimiento en 2025 alcance el 8%, sino que también abre expectativas para un desarrollo innovador en el período 2026-2030. Sin embargo, junto con las oportunidades vienen grandes desafíos.

El panorama económico mundial en 2025 sigue plagado de incertidumbre geopolítica , interrupciones en la cadena de suministro y crecientes tendencias proteccionistas. Las tensiones comerciales entre Estados Unidos, China y la UE obligan a Vietnam a mantener una posición más flexible y estable en la cadena de valor global.

En la XIII Conferencia del Comité Central del Partido se elevó el objetivo de crecimiento del PIB para 2025 al 8% o más, una cifra ambiciosa acompañada de expectativas de pensamiento y enfoques innovadores en las políticas de desarrollo económico .

Se espera que para 2025, la escala económica de Vietnam supere los 500 mil millones de dólares.

Oportunidades derivadas de la tecnología y flujos de capital de alta calidad

Una de las principales fuerzas impulsoras de la economía en 2025 es la tendencia de alta tecnología, especialmente la aplicación de inteligencia artificial (IA), robótica y biotecnología. Un informe de PricewaterhouseCoopers descubrió que una alta penetración de IA podría aumentar la productividad laboral hasta 4,8 veces. Esta es una oportunidad para que Vietnam ascienda en el juego de la economía del conocimiento.

Según el economista Nguyen Xuan Thanh (Universidad Fulbright), Vietnam necesita construir parques industriales de alta tecnología con un entorno de inversión transparente, infraestructura moderna y buenos recursos humanos profesionales.

“Solo cuando atraigamos flujos de capital de IED de calidad y fomentemos una transferencia real de tecnología podremos marcar la diferencia”, comentó el Sr. Thanh.

De hecho, según las previsiones de Bain & Company, las entradas de IED en Vietnam podrían aumentar hasta un 83% en el período 2025-2030, especialmente en los sectores de manufactura, servicios de alta calidad y tecnología de la información. Este es un recurso importante para que Vietnam promueva el crecimiento sostenible.

Las instituciones siguen siendo un cuello de botella que debe resolverse si Vietnam quiere convertirse en un centro regional de fabricación y tecnología. El Gobierno ha estado impulsando la reforma administrativa, racionalizando el aparato, digitalizando procedimientos y creando condiciones favorables para las empresas.

TS. Nguyen Anh Duong, Jefe del Departamento de Investigación General del CIEM, afirmó: «El espíritu innovador en la reforma institucional debe estar estrechamente vinculado a las realidades del mercado. La descentralización, una mayor descentralización hacia las localidades y una mayor autonomía de las empresas son pasos inevitables para crear un entorno competitivo sano y promover la innovación».

Además, la mejora de la calidad de los funcionarios públicos también desempeña un papel fundamental. Los programas modernos de formación gerencial, que utilizan la tecnología de la información en la gestión pública, ayudarán al Estado a operar más eficazmente en la economía digital.

En el contexto de las fluctuaciones económicas mundiales, Vietnam necesita mantener la estabilidad macroeconómica y controlar la inflación adecuadamente. Una gestión flexible del tipo de cambio, siguiendo de cerca las fluctuaciones del dólar estadounidense, el euro y el yen japonés, ayudará a aumentar la competitividad de los productos de exportación.

En particular, es necesario alentar a los bancos comerciales a reducir los tipos de interés de los préstamos y ampliar el acceso al capital para las pequeñas y medianas empresas. Simplificar los procedimientos crediticios y promover la digitalización en la banca son tendencias inevitables para apoyar a las empresas a restaurar la producción y expandir los mercados.

El economista Le Xuan Nghia enfatizó: «El principal motor de la política monetaria actual es la confianza. Si el operador logra estabilizar la confianza del mercado y controlar los riesgos de inflación, las empresas y los consumidores tendrán confianza para gastar e invertir».

Los recursos humanos de alta calidad son la palanca para la nueva era

2025 es el momento "dorado" para que Vietnam promueva la transformación digital, desarrolle una economía verde y promueva la industria de fabricación y procesamiento de alta tecnología. En la agricultura, la transición a modelos de agricultura orgánica y circular, incorporando tecnología de IA a la producción, ayudará a mejorar la productividad, el valor agregado y la resiliencia al cambio climático.

En la industria, se espera que la fabricación de productos electrónicos, la tecnología de la información, las energías renovables y los automóviles inteligentes se conviertan en pilares de la economía. En particular, los requisitos de los TLC como el EVFTA o el CPTPP sobre las emisiones de carbono y los estándares ambientales obligarán a las empresas vietnamitas a actualizar la tecnología, avanzando hacia una producción verde y circular.

Además, el desarrollo de la infraestructura de transporte -con proyectos como la autopista Norte-Sur y puertos marítimos internacionales- desempeñará un papel estratégico, ayudando a reducir los costos logísticos, aumentar la conectividad regional y crear un nuevo impulso para el comercio y los servicios.

Vietnam se enfrenta a un gran desafío en materia de calidad de sus recursos humanos, mientras que la Revolución Industrial 4.0 exige altas habilidades digitales, pensamiento creativo y adaptabilidad. La innovación educativa, el fomento de modelos de formación dual, la potenciación de la formación profesional y la cooperación internacional son soluciones clave.

Estudiantes de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hanoi realizan experimentos científicos.

Según el Ministerio de Educación y Capacitación, la vinculación con sistemas educativos avanzados como Alemania, Japón y Singapur no sólo ayuda a acceder a estándares de formación modernos, sino que también abre oportunidades para atraer expertos extranjeros. Además de ello, mejorar la remuneración y crear un entorno de trabajo creativo son factores clave para retener el talento nacional.

Vietnam se enfrenta a un punto de inflexión en su desarrollo. Los impulsores del crecimiento provenientes de la tecnología, la IED, la reforma institucional y los recursos humanos, si se coordinan sincrónicamente, llevarán a la economía a una era de fuerte crecimiento. La expectativa de un crecimiento del 8% para 2025 no es sólo un número, sino la declaración de una nación que reivindica un nuevo papel en el mapa económico mundial.

Fuente: https://thoibaonganhang.vn/de-tang-truong-ben-vung-voi-khat-vong-vuon-xa-163896.html