El mercado del comercio electrónico es un destino atractivo para la inversión extranjera, ya que permite a los consumidores vietnamitas acceder a una amplia gama de productos nacionales e internacionales, convirtiéndose así en consumidores globales. Las pequeñas y medianas empresas vietnamitas han aprovechado las plataformas modernas para desarrollar canales de distribución de bienes y productos.
La necesidad de promulgar la Ley de Comercio Electrónico
El viceministro de Industria y Comercio, Nguyen Sinh Nhat Tan, afirmó que estos resultados positivos se lograron gracias a que la normativa legal ha creado un marco jurídico relativamente claro y transparente para las actividades de comercio electrónico. Actualmente, el sector del comercio electrónico está regulado a nivel central, principalmente mediante dos documentos: el Decreto N.° 52/2013/ND-CP del Gobierno, de 16 de mayo de 2013, sobre comercio electrónico (Decreto 52), y el Decreto 85/2021/ND-CP, de 25 de septiembre de 2021, que modifica y complementa varios artículos del Decreto 52 (Decreto 85).
Sin embargo, al ser de nivel de decreto, los dos documentos mencionados aún no son suficientemente eficaces para regular cuestiones multisectoriales importantes del comercio electrónico. Además, el rápido desarrollo de la ciencia y la tecnología, la aparición de numerosos modelos de negocio nuevos, diversos en cuanto a su temática y de naturaleza compleja, y la experiencia de la gestión estatal en el ámbito del comercio electrónico, han provocado que las políticas y regulaciones sobre comercio electrónico presenten diversas deficiencias y limitaciones.
Según el viceministro de Industria y Comercio, Nguyen Sinh Nhat Tan, para garantizar un marco jurídico estable y duradero para los documentos legales, es necesario desarrollar una Ley de Comercio Electrónico en lugar de mantener documentos a nivel de decreto. Esto se debe a que la ley tiene mayor validez jurídica que el decreto y constituye la base para regular cuestiones importantes, fundamentales e integrales en el ámbito del comercio electrónico. El decreto debe fundamentarse en una ley. Sin una ley base, el decreto carecerá de la fuerza suficiente para regular cuestiones importantes en este campo. Además, el comercio electrónico es un sector complejo que involucra a numerosos actores, tanto nacionales como extranjeros, por lo que resulta imprescindible contar con un marco jurídico estable y duradero para su regulación.
El comercio electrónico abarca numerosas áreas como el comercio, las transacciones electrónicas, la protección de los derechos del consumidor, la gestión tributaria, la seguridad de los datos y la lucha contra el fraude comercial. Por consiguiente, las relaciones jurídicas en este ámbito se rigen actualmente por diversos documentos legales pertenecientes a diferentes ramas del derecho, como la Ley Mercantil, la Ley de Transacciones Electrónicas, la Ley de Seguridad de la Información en Redes y la Ley de Ciberseguridad. Sin embargo, la normativa vigente no es lo suficientemente detallada ni específica para abordar las cuestiones particulares y complejas del comercio electrónico. Para regular estas cuestiones de forma exhaustiva y completa, es necesario desarrollar una normativa específica.
Además, los decretos vigentes no están en consonancia con otras normativas legales como la Ley de Protección al Consumidor, la Ley de Administración Tributaria y la Ley de Propiedad Intelectual, entre otras. Recientemente se han promulgado diversas leyes relacionadas con el comercio electrónico, ampliando así su ámbito de aplicación y sus sujetos de regulación, e introduciendo nuevos conceptos y normas. Por consiguiente, el desarrollo de la Ley de Comercio Electrónico contribuye a evitar duplicidades y conflictos legales entre las distintas normativas.
La promulgación de una ley especializada en comercio electrónico no solo resolverá los problemas actuales, sino que también dará forma al futuro del sector, garantizando un desarrollo equilibrado entre la gestión estatal, los derechos de los consumidores y los intereses empresariales.
Los nuevos modelos de comercio electrónico no tienen su propia normativa.
Con la aparición de nuevas tecnologías y plataformas como el Big Data y la Inteligencia Artificial (IA), los modelos de comercio electrónico se están volviendo cada vez más complejos y diversos, pero actualmente no existen regulaciones legales específicas.
El viceministro de Industria y Comercio, Nguyen Sinh Nhat Tan, afirmó que la creación de una plataforma de integración multiservicio, que permita alojar pequeñas aplicaciones en una misma superaplicación, se está convirtiendo en una tendencia futura. En lugar de tener que descargar todas las aplicaciones por separado, los usuarios podrán descargar una superaplicación que contenga todas las aplicaciones pequeñas que se ejecutan en ella.
Sin embargo, el problema radica en la responsabilidad legal de los propietarios de aplicaciones en relación con la provisión de bienes y servicios de las aplicaciones integradas: ¿Cómo se determinará la responsabilidad de las partes si surge algún problema durante el proceso de transacción? Además, las superaplicaciones ofrecen numerosos servicios, lo que conlleva la recopilación de grandes cantidades de datos de usuario (ubicación, transacciones, preferencias). Esto plantea la cuestión de la protección de datos personales, que puede generar el riesgo de que las plataformas digitales se aprovechen de la competencia desleal, captando usuarios e impidiendo la entrada al mercado de otras organizaciones y empresas.
En particular, una tendencia en rápido crecimiento del comercio electrónico son las ventas por transmisión en directo. La normativa legal vigente regula las ventas por transmisión en directo como una actividad publicitaria que acompaña a las ventas, sin establecer regulaciones específicas sobre los participantes en la transmisión (titulares de cuentas, participantes), la información mínima que debe proporcionarse a los espectadores, las cualificaciones profesionales del transmisor, la identificación del titular de la cuenta, las obligaciones fiscales ni el control de la información durante la transmisión.
El hecho de que los modelos y tendencias mencionados excedan el alcance de las políticas vigentes dificulta la gestión, especialmente en lo relativo a la protección de los derechos del consumidor, la protección de datos personales y la evasión fiscal. En la práctica, se han dado numerosos casos, como transmisiones en directo que venden productos por valor de miles de millones de dongs sin que el Estado pueda recaudar impuestos, o reinas de belleza internacionales que utilizan transmisiones en directo para vender dulces vegetales, exagerando las funciones del producto, lo que influye negativamente en las decisiones de compra y la salud de los consumidores.
Como actividad comercial basada en la tecnología, el comercio electrónico se ve profundamente afectado por la constante evolución tecnológica. La Resolución N° 57-NQ/TW del Politburó afirmó que el desarrollo de la ciencia, la tecnología, la innovación y la transformación digital nacional constituyen el avance prioritario y el principal motor del desarrollo socioeconómico.
Por consiguiente, resulta fundamental crear un marco legal para nuevos modelos de comercio electrónico, como los contratos automatizados. La promulgación en 2024 de la Ley Modelo sobre el Uso y el Reconocimiento Transfronterizo de los Contratos Automatizados por parte de la Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional (CNUDMI) evidencia la tendencia e interés de países y organizaciones internacionales en este tipo de contratos. En Vietnam, los contratos automatizados han surgido y se aplican en diversos sectores especializados, como las finanzas, la banca y el comercio electrónico. El reto consiste en definir con claridad las responsabilidades jurídicas de las partes que participan en dichos contratos.
El comercio electrónico de Vietnam es altamente valorado por prestigiosas organizaciones de investigación de mercado, ocupando el tercer lugar en el sudeste asiático en términos de escala en 2024 y el quinto en el mundo en términos de tasa de crecimiento en 2022. La escala del mercado minorista de comercio electrónico B2C ha crecido rápidamente de 2.970 millones de dólares en 2014 a 25.000 millones de dólares en 2024, con un crecimiento promedio del 20-30% durante el período, contribuyendo con el 10% de los ingresos totales de bienes y servicios de consumo a nivel nacional en 2024.
Fuente: https://baotintuc.vn/chinh-phu-voi-nguoi-dan/phat-trien-thuong-mai-dien-tu-dat-trong-he-sinh-thai-chuyen-doi-so-20250925144156592.htm






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