El ajo contiene muchos compuestos vegetales beneficiosos que son buenos para el corazón, refuerzan el sistema inmunológico y combaten la inflamación..., según el sitio web de salud Everyday Health .
Presión arterial baja
La Sra. Sudha Raj, profesora de Nutrición y Estudios Alimentarios de la Universidad de Syracuse (EE.UU.), afirmó que el ajo estimula la síntesis de óxido nítrico, dilatando los vasos sanguíneos.
Muchos estudios demuestran que el ajo ayuda a reducir la presión arterial de forma eficaz.
En un estudio, 550 personas con presión arterial alta consumieron ajo durante tres meses. La presión arterial sistólica disminuyó aproximadamente 8 puntos y la diastólica, aproximadamente 5,5 puntos.
Reducir la inflamación
Según Harvard Health Publishing (EE.UU.), la inflamación crónica es la causa de enfermedades cardíacas, diabetes, cáncer y artritis.
El ajo puede inhibir la actividad de ciertas proteínas inflamatorias. En un estudio, 70 mujeres con artritis reumatoide tomaron 1000 miligramos de suplementos de ajo al día durante ocho semanas. Posteriormente, experimentaron una reducción de la inflamación y la fatiga.
Bajar el colesterol
"El ajo puede reducir la producción de colesterol en el hígado", afirma Wendy Bazilian, nutricionista en Estados Unidos.
El ajo también ayuda a reducir tanto el colesterol total como el colesterol LDL (malo). Estos son dos factores que causan enfermedades cardíacas.
Apoyo inmunológico
La alicina del ajo tiene propiedades antibacterianas, afirma Bazilian. Los científicos también creen que el ajo tiene propiedades antivirales, lo que significa que impide que los virus entren en las células y refuerza la respuesta inmunitaria.
Reducir la coagulación sanguínea
Se ha demostrado que el ajo y la cebolla tienen propiedades anticoagulantes, lo que reduce el riesgo de aterosclerosis.
Según el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (NHLBI), la aterosclerosis aumenta el riesgo de coágulos sanguíneos, lo que puede provocar infartos y accidentes cerebrovasculares. Sin embargo, el ajo no es la única medida preventiva. El NHLBI recomienda llevar una dieta saludable, hacer ejercicio y dejar de fumar.
Proporciona antioxidantes
Según investigaciones, el ajo tiene propiedades antioxidantes. El Instituto Americano para la Investigación del Cáncer afirma que los antioxidantes benefician los vasos sanguíneos, reducen la inflamación y ayudan a absorber los radicales libres dañinos.
Según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), el ajo también puede ayudarte a reducir la cantidad de sal en tus platos. Cada diente de ajo contiene solo unas 4 calorías.
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