
Deseo de paz
Las obras de la colección Da Vang Songs no sólo reflejan el dolor de los tiempos, sino que también expresan el apasionado deseo de paz, armonía y curación de las heridas dejadas por la guerra.
A través del lenguaje de la música, Trinh Cong Son entró silenciosamente en los momentos cotidianos, evocando así profundidad emocional y pensamientos humanísticos. Para él, la guerra no es sólo un enfrentamiento entre dos bandos, sino también un doloroso corte en el destino de todo ser humano, especialmente de las personas inocentes que no tienen armas.
En la canción "Mother O Ly", Trinh Cong Son describe la imagen de una madre de la región central con una voz sencilla pero conmovedora:
Una mañana en la carretera
Mamá va al jardín trasero.
Pregunta por la calabaza verde en el enrejado.
Es la historia real de una anciana madre de Quang Tri, que en 1972 caminó 120 km hasta Hue con sólo una calabaza en la mano, el único bien que le quedaba en medio de la caótica guerra. La canción es corta, con pocas palabras pero toca el corazón. Muestra la extraordinaria fuerza interior de las personas pequeñas: mujeres que llevan sobre sus hombros tanto el dolor de la pérdida como la frágil creencia en el día del reencuentro.
De manera similar, en la canción “Canción popular de la madre”, Trinh Cong Son dejó que la canción de cuna de la madre se convirtiera en el triste eco de una generación que vive entre bombas que caen y balas que explotan:
La madre se sienta y mece a su bebé en una hamaca, triste mientras los años pasan y su edad la desgasta.
La madre mira su tierra natal y escucha las tristes lágrimas de arrepentimiento de su hijo.
Las lágrimas de arrepentimiento me traen de vuelta al mundo mortal para sufrir humillación de por vida.
Un río fluye eternamente hacia el cielo incierto del destino humano.
Esa canción de cuna no es sólo para un niño, sino para toda la nación en tiempos de división. En esa canción de cuna hay sentimientos, lágrimas y el amor puro y duradero de una madre por su patria.
Fue ese amor, presente en la música de Trinh Cong Son, lo que se convirtió en la base para transmitir el mensaje de paz. La paz, a su juicio, no empieza con negociaciones ni con lemas, sino que empieza en el corazón humano, donde todavía hay amor, preocupación y dolor por el sufrimiento de otros seres humanos.
Pulsera grande
Y también del deseo de paz y unificación, Trinh Cong Son escribió la canción "Unir las manos". La canción fue lanzada en 1968, cuando el país todavía estaba dividido y la guerra no mostraba señales de terminar.

La melodía de la canción es cordial y la letra repite el verbo "conectar" como una súplica urgente. Trinh Cong Son no sólo deseaba conectar la tierra con el cielo, no sólo conectar el Sur con el Norte, sino también conectar a las personas, corazones que parecían incapaces de latir juntos, más cerca unos de otros. La paz en él es un abrazo pleno, un Vietnam conectado de Sur a Norte:
Las montañas y los bosques se extienden para conectarse con el mar lejano.
Vamos de la mano para siempre para conectar el país.
Cada verso es una capa de significado. De la bandera a la gota de sangre. Conectando la ciudad con el campo. Conectando a los vivos con los muertos. Es la paz de la compasión, de la tolerancia, de la memoria y del futuro fusionados.
La paz no está sólo en el papel o en los mapas, sino que es el tipo de paz que existe en cada acto de altruismo, en cada apretón de manos comprensivo, en cada lágrima de empatía entre personas de la misma sangre. Es una paz que comienza con el perdón y el recuerdo mutuo como partes de un hogar común: la Patria.
La aspiración de Trinh Cong Son más tarde se convirtió en realidad. En la tarde del 30 de abril de 1975, el músico Trinh Cong Son apareció en la estación de radio de Saigón y cantó "Joining Hands in a Big Circle". No fue una actuación normal, sino un momento en el que el arte y la historia convergieron. En medio de la alegría de millones de personas, la canción surgió como un juramento para el futuro: avanzar juntos, sin odio, solo con esperanza.
Después de que el país se unificó completamente, "Manos unidas" de Trinh Cong Son se convirtió rápidamente en un símbolo cultural que se extendió por todo el país. La canción resuena en los patios de las escuelas, en los intercambios artísticos, en los programas comunitarios, como una levadura que une los corazones de las personas.
Incluso hoy, después de tantos cambios, todavía no envejece. Porque la paz nunca es algo dado. La paz es un camino que se mantiene gracias a la inteligencia, a la emoción, a la tolerancia y al esfuerzo constante.
La música no puede detener la caída de bombas, pero puede despertar la conciencia humana. Y donde hay compasión, hay una posibilidad de que florezca la paz.
El legado que dejó Trinh Cong Son no son solo canciones de amor inmortales. Es un músico del amor, del dolor y de los sueños incumplidos. Pero, sobre todo, es un músico de paz: esa paz que nace en el corazón, se propaga a través de la melodía y continúa preservándose mediante grandes brazos unidos a lo largo de muchas generaciones.
Fuente: https://baoquangnam.vn/trinh-cong-son-va-noi-vong-tay-lon-3153758.html
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