La deshidratación es una condición en la que la cantidad de agua y minerales como el potasio y el sodio en el cuerpo se reduce drásticamente por debajo del equilibrio. En personas sanas, en condiciones normales, el cuerpo excreta agua a través del sudor, las lágrimas, el aliento, la orina y las heces. Esta cantidad de agua se repone rápidamente bebiendo o comiendo alimentos que la contengan, según el Daily Express (Reino Unido).
La deshidratación grave aumenta el riesgo de que se formen coágulos sanguíneos en el cerebro.
En las personas enfermas, la diarrea y los vómitos son síntomas que pueden deshidratar fácilmente el cuerpo. Los niños y las personas mayores de 60 años tienen un alto riesgo de deshidratación.
Los síntomas comunes de deshidratación incluyen sed, disminución de la micción, piel seca, fatiga, mareos, sequedad bucal, aumento de la frecuencia cardíaca y mejillas y ojos hundidos. Además, los expertos médicos advierten que la deshidratación grave también puede predisponer al cuerpo a enfermedades neurológicas poco comunes relacionadas con el sobrecalentamiento, como la trombosis venosa cerebral. Esta enfermedad provoca la formación de coágulos sanguíneos en las venas principales del cerebro.
Los estudios demuestran que la deshidratación grave aumenta la concentración de glóbulos rojos, lo que provoca su aglutinación con las plaquetas. Esto provoca la formación de un coágulo sanguíneo. En muchos casos, el coágulo se disuelve antes de causar daño cerebral. Sin embargo, en algunos casos, el coágulo no se disuelve y causa un derrame cerebral, lo que a su vez deriva en una hemorragia cerebral.
En ese momento, se interrumpe la circulación sanguínea al cerebro. El tejido cerebral se daña y muere por falta de oxígeno. Si el paciente no recibe tratamiento oportuno, puede sufrir graves consecuencias, como parálisis o incluso la muerte.
Para prevenir el riesgo de coágulos sanguíneos debido a la deshidratación, es necesario asegurarse de que el cuerpo esté bien hidratado. Beba agua siempre que tenga sed. En particular, el cuerpo necesita reponer más agua cuando suda mucho por la exposición al sol, el ejercicio o el movimiento excesivo.
Comer alimentos ricos en agua, como la fruta, también es una forma eficaz de reponerla. Según el Daily Express, las personas con enfermedades como diarrea, vómitos y fiebre deben beber abundante agua y evitar el alcohol y los alimentos con alto contenido de cafeína , como el té y el café.
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