El aumento de la secreción de moco en las vías respiratorias es el mecanismo de respuesta natural del cuerpo para lubricar y combatir los agentes inflamatorios. Cuando las bacterias y los virus atacan la mucosa respiratoria, el aumento de la secreción de moco ayuda a eliminarlos, según el sitio web de salud Medical News Today (Reino Unido).
Beber un poco de miel antes de acostarse ayudará a reducir la tos y facilitará el sueño.
Las reacciones comunes incluyen goteo nasal, picazón en la garganta y tos. Al dormir, la mucosidad bajará más por la garganta que al acostarse, lo que empeora la tos.
La tos puede dificultar el sueño. Es importante reducir la tos para conciliar el sueño. Una de las mejores maneras de reducirla es mezclar un poco de miel y pimienta.
El método para preparar esta mezcla para suprimir la tos es muy sencillo. Solo hay que añadir un poco de pimienta negra a una cucharada de miel, ponerla en la boca, beberla a sorbos y tragarla. Si se trata de un niño, solo se necesita una cucharadita de miel, y para los adultos, una cucharada.
Numerosos estudios han demostrado que la miel y la pimienta negra son eficaces para reducir la tos. Un estudio publicado en la revista Pediatrics reveló que tomar miel antes de acostarse reducía la tos y mejoraba la calidad del sueño. Este beneficio se debe a sus propiedades reductoras de mucosidad.
Mientras tanto, la pimienta no es solo una especia, sino que también tiene propiedades medicinales. Una investigación publicada en la Revista de Farmacia y Farmacología descubrió que la piperina presente en la pimienta ayuda a combatir la inflamación y a mejorar las infecciones respiratorias.
Además de la miel y la pimienta negra, los pacientes también pueden aplicar otras medidas para reducir la tos al acostarse. La forma más sencilla es beber agua tibia e inhalar suavemente el vapor. El calor del agua ayudará a humedecer la mucosa sinusal y a ablandar la mucosidad acumulada en la garganta, facilitando así su expulsión.
Otra opción es rociar la nariz con solución salina. Esto ayudará a diluir y eliminar la mucosidad de la nariz antes de acostarse. Hacer gárgaras con agua salada o beber agua caliente con limón también puede ayudar a reducir la tos, según Medical News Today.
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