Según el informe, el trabajo de evaluación y clasificación de la calidad de los cuadros y funcionarios públicos se ha vuelto gradualmente más sustancial, más vinculado a los resultados del trabajo y productos específicos, vinculando la evaluación individual con los resultados del desempeño colectivo y de tareas de las localidades, agencias y unidades.
Además de ello, el tratamiento de los cuadros y servidores públicos que violan la disciplina debe garantizar los principios de objetividad, equidad, publicidad, rigor, exactitud, puntualidad, correcta autoridad, orden y procedimientos conforme a las normas.
De esta manera, se contribuye a la lucha y prevención de la corrupción, la negatividad, los intereses de grupo y la degradación de la ideología política , la ética y el estilo de vida. El informe del Ministerio del Interior indicó claramente que, desde principios de 2024 hasta la fecha, 139 cuadros y 432 funcionarios públicos han sido sancionados.
En los últimos tiempos, el Gobierno ha seguido corrigiendo y fortaleciendo la disciplina y el orden administrativos, promoviendo el espíritu de innovación y creatividad de los funcionarios y empleados públicos. El Gobierno y el Primer Ministro han emitido numerosos documentos para superar por completo la situación de eludir responsabilidades, trabajar a medias, eludir responsabilidades y temerlas.
La destitución y renuncia de dirigentes y gerentes se implementan estrictamente de acuerdo con los reglamentos del Partido y la ley, especialmente en los casos de dirigentes y gerentes que hayan sido disciplinados.
Además de los resultados alcanzados, la gestión de cuadros y funcionarios públicos aún presenta limitaciones. Por consiguiente, los resultados de la evaluación de cuadros y funcionarios públicos en algunos organismos y unidades no reflejan con precisión los resultados y no han generado motivación para que se esfuercen y desarrollen plenamente su capacidad para desempeñar sus tareas y funciones públicas.
Todavía existe una situación de evasión, de presión, de trabajo a medias, de miedo a la responsabilidad y de no atreverse a trabajar en algunos ministerios, organismos, localidades y en una serie de cuadros y funcionarios públicos, especialmente dirigentes y gerentes.
La labor de inspección de los funcionarios y la función pública en algunas agencias y unidades no es regular ni oportuna. El cumplimiento de la disciplina, la disciplina administrativa, la aplicación de la ética pública y el espíritu y la actitud de trabajo en algunas agencias, unidades, cuadros y funcionarios no son realmente serios.
Para superar las deficiencias y limitaciones mencionadas, en el futuro el Gobierno seguirá promoviendo la descentralización y la delegación de poderes para aumentar la autonomía y la autorresponsabilidad de los ministerios, las ramas y las localidades, y mejorar la calidad del reclutamiento de funcionarios públicos.
Junto con ello, es necesario unificar la evaluación de la calidad del ingreso de los servidores públicos; perfeccionar e implementar bien los mecanismos y políticas para atraer y promover a personas talentosas con buenas calificaciones profesionales para trabajar en los organismos del Estado.
Fortalecer la inspección y el examen de los servicios públicos, reforzar la disciplina, la disciplina administrativa y el control, y mejorar la calidad y la eficacia del desempeño de los cuadros y servidores públicos. Promover la implementación de las normas legales para fomentar y proteger a los cuadros dinámicos y creativos que se atreven a pensar, actuar y asumir la responsabilidad por el bien común.
En particular, tratar y remover con severidad, prontitud y decisión del aparato estatal a los cuadros y funcionarios que hayan degradado su ideología política, ética, estilo de vida, hayan eludido sus responsabilidades, hayan cometido violaciones o no hayan cumplido las tareas asignadas.
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