Se prevé que las crisis climáticas exacerben la escasez de agua. Por lo tanto, la gestión del agua se ha convertido en una prioridad para los responsables políticos. El gobierno chino ha promulgado recientemente la "Reforma del Impuesto sobre los Recursos Hídricos" para fortalecer la gestión, la protección y la promoción de la conservación y el uso seguro de los recursos hídricos.
A partir del 1 de diciembre, el Ministerio de Finanzas , la Administración Estatal de Impuestos y el Ministerio de Recursos Hídricos de China implementarán de forma integral medidas piloto sobre nuevas regulaciones, reemplazando la tasa de recursos hídricos por un impuesto sobre estos recursos. La implementación integral del programa piloto se adherirá principalmente a los principios de transición fluida, normas de clasificación mejoradas, consideración de las diferencias regionales y movilización de la iniciativa local.
Según la nueva normativa, las entidades sujetas al pago del impuesto sobre los recursos hídricos son las organizaciones y personas que explotan directamente los recursos hídricos de ríos, lagos (incluidos proyectos de asignación de recursos hídricos, como embalses y proyectos de trasvase de agua) y fuentes de agua subterránea. El impuesto sobre los recursos hídricos se aplica de forma cuantitativa, y su importe varía en función de las condiciones de los recursos hídricos, el tipo de consumo de agua y el desarrollo económico .
Una vez que se haya implementado completamente el programa piloto para reemplazar las tarifas de los recursos hídricos por impuestos, todos los ingresos provenientes de los impuestos sobre los recursos hídricos pertenecerán a los gobiernos locales, con el objetivo de fortalecer la independencia financiera local.
Los recursos hídricos de China son escasos, con una disponibilidad de agua per cápita de tan solo una cuarta parte del promedio mundial. Para promover la construcción de ciudades eficientes en el uso de los recursos y respetuosas con el medio ambiente, concienciar a la población sobre la protección y el uso eficiente del agua, y fomentar un estilo de vida ecológico, China puso en marcha proyectos piloto para reformar los impuestos sobre el agua en 10 provincias, regiones autónomas y municipios directamente dependientes del gobierno central, entre ellos Hebei, Pekín y Tianjin, a partir del 1 de julio de 2016.
Algunos estudios sugieren que los impuestos sobre los recursos hídricos aumentan la carga para los contribuyentes y no favorecen la conservación del agua. Sin embargo, las reformas piloto han logrado resultados notables en la reducción de la sobreexplotación de las aguas subterráneas, la modificación de las prácticas de uso del agua y la promoción de transiciones hacia el ahorro de agua.
Dado que los impuestos sobre los recursos hídricos incrementarían la carga fiscal sobre el consumo de agua, se anima a las entidades a adoptar nuevas tecnologías de conservación del agua. Este enfoque se ha considerado desde hace tiempo una forma eficaz de conservar el agua y modificar los patrones de uso en sectores de alto consumo.
Además, la obligatoriedad del impuesto contribuye a la concienciación y a que cada entidad en general, y los consumidores individuales en particular, sean conscientes de la escasez de recursos hídricos y avancen hacia un consumo sostenible del agua. Finalmente, los ingresos del impuesto pueden invertirse en la protección y restauración de los recursos hídricos.
La implementación de políticas fiscales sobre los recursos hídricos en China es idónea para una evaluación científica del impacto neto de la escasez de agua. Según Frontiers, este también es un componente crucial de las estrategias de reducción de la pobreza hídrica. La "pobreza hídrica" es un concepto que va más allá de la mera escasez de agua y es multidimensional, centrándose específicamente en los aspectos sociales y económicos de la gestión de los recursos hídricos.
Hanh Chi
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Fuente: https://www.sggp.org.vn/loi-ich-tu-thue-tai-nguyen-nuoc-post763993.html
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