Sábado, 3 de febrero de 2024, 06:08 (GMT+7)
-Un punto de inflexión importante en la historia
En su viaje para encontrar una manera de salvar el país, el joven patriota Nguyen Ai Quoc se encontró con el marxismo-leninismo, del cual encontró el camino correcto para salvar el país: llevar a la revolución vietnamita a seguir el camino de la revolución proletaria, allanando el camino para que la revolución vietnamita escape de la crisis, la forma de salvar el país y desarrollarse fuertemente, vinculando el movimiento revolucionario vietnamita con el movimiento revolucionario mundial .
El presidente Ho Chi Minh afirmó constantemente: «Para triunfar, la revolución necesita un partido dirigente. El Partido debe ilustrar a las masas sobre las razones de su opresión y explotación; debe enseñarles a comprender las leyes del desarrollo social, para que comprendan claramente el propósito de la lucha; mostrarles el camino de la liberación, animarlas a llevar adelante la revolución con determinación; hacerles creer que la revolución triunfará sin duda. La revolución es una lucha muy compleja. Para no perder el rumbo, las masas necesitan un Partido dirigente que comprenda claramente la situación, el camino y establezca las directrices correctas».[1]
De hecho, el nacimiento del Partido Comunista de Vietnam el 3 de febrero de 1930 fue el resultado inevitable de la completa preparación del líder Nguyen Ai Quoc en términos políticos, ideológicos y organizativos. Combinó hábilmente el marxismo-leninismo con el movimiento obrero y el movimiento patriótico para formar el Partido Comunista de Vietnam.
El nacimiento del Partido Comunista de Vietnam se ajusta a las leyes de desarrollo de la época y satisface las exigencias de la revolución vietnamita. El Partido Comunista de Vietnam es el único partido que, desde sus inicios, ha asumido la misión de liderar la revolución vietnamita y ha mantenido la línea revolucionaria correcta.
El Partido Comunista de Vietnam es el partido político de la clase obrera vietnamita, la vanguardia de la clase obrera, con naturaleza obrera y un profundo carácter popular y nacional; capaz de unir, congregar y atraer a todas las clases populares para levantarse y luchar por la revolución, constituyendo el factor principal que decide todas las victorias de la revolución vietnamita.
Al evaluar este acontecimiento, el presidente Ho Chi Minh afirmó: «La fundación del Partido constituye un punto de inflexión fundamental en la historia de la revolución vietnamita. Demuestra que nuestro proletariado ha madurado y es capaz de liderar la revolución»[2].
Desde entonces, la revolución vietnamita ha pasado por muchos altibajos, ha superado muchas tormentas y rápidos y ha demostrado cada vez más ser la fuerza de dirección de vanguardia de la clase obrera, el pueblo trabajador y la nación vietnamita.
Liderando la revolución vietnamita de una victoria a otra
A través de los movimientos, el Partido ha demostrado cada vez más sus cualidades, capacidad y prestigio en el poder, en el que el pueblo confía y confía. Esto también confirma la gran tesis del presidente Ho Chi Minh: para que una revolución triunfe, debe haber un Partido dirigente. Como él mismo enfatizó: «Nuestro Partido tiene bases en todo el país. Ha atraído a las personas más revolucionarias y destacadas de la clase obrera, del pueblo trabajador y de la nación. El Partido tiene la plataforma y la línea correctas. El Partido lidera a todo el pueblo para unirse en la resistencia, logrando numerosas victorias».[3]
De hecho, bajo la luz del pensamiento de Ho Chi Minh, con directrices estratégicas y tácticas correctas, el Partido Comunista de Vietnam ha llevado la revolución vietnamita de una victoria a otra.
Nuestro Partido movilizó, organizó y dirigió a las masas para llevar a cabo movimientos revolucionarios en gran escala, preparó fuerzas revolucionarias, aprovechó las oportunidades y dirigió con éxito el Levantamiento General de agosto de 1945, tomando el poder en todo el país.
A la victoria de la Revolución de Agosto de 1945 le siguió la gloriosa victoria de dos guerras de resistencia contra el colonialismo francés y el imperialismo estadounidense.
En particular, los logros del proceso de renovación de los últimos 40 años, iniciado y liderado por nuestro Partido, han dado muchos resultados importantes. Como afirmó el XIII Congreso Nacional del Partido: «Nuestro país nunca ha tenido tanta base, potencial, posición y prestigio internacional como hoy».
Fiel y aplicando creativamente el pensamiento de Ho Chi Minh sobre el Partido Comunista, bajo el liderazgo del Partido con la política de renovación correcta y creativa, nuestro pueblo ha alcanzado importantes logros, superando las consecuencias de la guerra, el sistema socioeconómico se ha desarrollado gradualmente, la vida de las personas ha mejorado gradualmente, las relaciones internacionales se han expandido constantemente, la defensa y la seguridad nacionales se han fortalecido, la fuerza general del país se ha mantenido y desarrollado continuamente, protegiendo firmemente la Patria socialista vietnamita.
Esto reafirma de manera más vívida y convincente la exactitud práctica del pensamiento de Ho Chi Minh sobre el papel de liderazgo del Partido en la revolución vietnamita.
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[1] Obras completas de Ho Chi Minh, op. cit., vol. 8, pág. 273.
[2] Obras completas de Ho Chi Minh, op. cit., volumen 12, pág. 406.
[3] Obras completas de Ho Chi Minh, op. cit., vol. 7, pág. 395.
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