La FA Cup es la última esperanza del MU de ganar un título esta temporada. El sorteo ha dado a los "Diablos Rojos" una victoria fácil en semifinales, mientras que su rival, el Coventry City, juega en la segunda división inglesa.
El MU (con camiseta roja) se enfrentó a un oponente más fácil, pero aún así tuvo que luchar hasta la tanda de penaltis para asegurar su lugar en la final de la Copa FA.
Tras ver casi frustradas sus esperanzas de clasificarse para la Champions League, el Manchester United se enfrentó a otro problema con el estallido de conflictos internos. Antes de la semifinal de la FA Cup, el joven talento Alejandro Garnacho criticó públicamente al entrenador Erik ten Hag en redes sociales. Sin embargo, el técnico holandés le garantizó al joven de 19 años un lugar en el partido contra el Coventry City tras recibir una disculpa del jugador.
La superioridad del Manchester United fue evidente desde el pitido inicial. Aprovecharon su dominio con dos goles en la primera parte, cortesía de Scott McTominay y Harry Maguire.
El MU mantuvo el control del partido en la primera mitad de la segunda parte, donde Bruno Fernandes amplió la ventaja a 3-0. Sin embargo, cuando la victoria parecía estar al alcance, el equipo del entrenador Ten Hag casi tuvo que pagar el precio de sus errores defensivos.
El Coventry City protagonizó una remontada espectacular.
A pesar de ir perdiendo, el Coventry se mantuvo firme, y sus esfuerzos se vieron recompensados con dos goles inesperados de Ellis Simms (minuto 71) y Callum O'Hare (minuto 79), reduciendo la diferencia a 2-3. Sin detenerse ahí, en el quinto minuto del añadido, el equipo de Mark Robinson volvió a castigar al MU, igualando 3-3 con un penalti ejecutado (debido a una mano de Aaron Wan-Bissaka en el área) por Haji Wright.
Ambos equipos tuvieron que ir a la prórroga, pero no hubo más goles y el partido se decidió en la tanda de penaltis. En la tensa tanda, el MU fue más preciso y finalmente ganó 4-2.
MU tuvo un comienzo fácil contra Coventry City, pero casi se derrumba debido a una remontada espectacular de sus oponentes.
Tras una reñida victoria sobre el Coventry City, el MU avanzó a la final de la FA Cup para enfrentarse a su rival de la ciudad, el Manchester City (que venció al Chelsea por 1-0 en la semifinal) el 25 de mayo. Esta era su última oportunidad de remontar una temporada decepcionante y, potencialmente, salvar el puesto del entrenador Ten Hag.
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