
La entrada en vigor de la Ley de Profesores supondrá muchos cambios para el personal docente.
FOTO: DAO NGOC THACH
La Ley de Docentes faculta a los maestros para mantener la ética.
La aprobación de la Ley del Profesorado y la normativa que eleva los salarios docentes al nivel más alto de la escala salarial de la carrera administrativa son muy positivas, pero también conllevan una gran responsabilidad. Por primera vez en la historia de la legislación educativa , se reconoce la posición del profesorado con el máximo reconocimiento dentro del sector de la carrera administrativa.
No solo es motivo de alegría, sino también de un despertar del espíritu profesional del profesorado en todo el país. Cuando recibimos un salario justo, comprendemos que la sociedad deposita una gran confianza y expectativas en las cualidades, habilidades y dedicación de los docentes. El reto consiste en implementar pronto esta regulación mediante normativas específicas, de modo que el aumento de ingresos no se quede solo en el papel, sino que se traduzca en beneficios reales, ayudando a los docentes a mantener la ética, amar su profesión y dedicarse plenamente a sus alumnos.
Además, la Ley de Docentes no prohíbe la enseñanza y el aprendizaje extracurriculares, sino la coacción y el lucro. Esta es una perspectiva progresista y humana, un cambio muy acertado, práctico y que fomenta la integridad en la profesión docente.
Durante muchos años, las clases particulares han sido un tema delicado y controvertido. Sin embargo, prohibirlas por completo es irreal, sobre todo cuando la necesidad de tutorías y actividades de enriquecimiento para los estudiantes es real y legítima. Lo importante es evitar la coacción, la intimidación, la mercantilización de las clases particulares y el deterioro de la relación entre profesores y alumnos.
El hecho de que la Ley del Profesorado no prohíba la docencia complementaria, pero sí la coacción, establece una clara distinción entre ética y faltas. Esto permite al sector educativo actuar con rigor ante las infracciones, a la vez que protege a los docentes honestos que se dedican a impartir clases complementarias, de conformidad con la ley, en beneficio del alumnado. La integridad profesional es fundamental para recuperar la confianza social en el profesorado.

Los salarios de los docentes se encuentran entre los más altos del sistema de escalas salariales y el sector educativo es proactivo en la contratación de profesores, factores que se espera contribuyan a mejorar la calidad de la educación.
Foto: Dao Ngoc Thach
Los documentos sublegislativos deben ser coherentes.
Si la Ley de Docentes ya está en vigor, ¿es necesario ajustar documentos normativos como la Circular 29 para que sean coherentes? Sin duda, se requieren ajustes. No podemos permitir que la ley vaya en una dirección y la política de aplicación en otra.
La Circular 29 presenta actualmente varios puntos que no se ajustan al nuevo espíritu de la Ley de Docentes. Por ejemplo, la normativa sobre pruebas y evaluación docente, así como los procedimientos disciplinarios, siguen siendo mecánicos y formales. Dado que la ley ha establecido el papel central del profesorado en el proceso educativo, es imperativo modificar con prontitud las circulares y decretos pertinentes para proteger los derechos legítimos del profesorado y mejorar su capacidad profesional, en lugar de incrementar la carga administrativa. La armonización entre la ley y sus reglamentos es fundamental para que la Ley de Docentes no sea solo un hito simbólico, sino un punto de inflexión para una reforma sustancial.
La Ley del Profesorado es la primera ley que se centra en los docentes, no solo en términos de ingresos, sino también en cuanto a su estatus, ética, derechos y responsabilidades profesionales. Sin embargo, esta ley solo se hará efectiva si modificamos decididamente las políticas relacionadas y las implementamos de manera transparente, justa y consistente. Solo entonces los docentes podrán mantener su vocación intacta —siempre con la misma pasión— y contribuir al desarrollo de la educación en nuestro país.
El salario más alto y la captación proactiva de talento contribuirán a mejorar la calidad de la educación.
Cuando los salarios de los docentes se sitúan en el nivel más alto del sistema de escala salarial de la carrera administrativa, pueden dedicarse a la enseñanza y estabilizar su vida familiar sin tener que preocuparse por el sustento económico trabajando horas extras o impartiendo clases adicionales... Los docentes necesitan adaptarse activamente para satisfacer las nuevas demandas del país.
Colocar los salarios docentes en el nivel más alto del sistema salarial administrativo resolverá uno de los mayores problemas del sector educativo: la captación y retención de talento. Los salarios elevados atraerán a estudiantes brillantes a la docencia y, al mismo tiempo, retendrán a docentes con una sólida formación profesional. Esto permitirá crear un equipo docente de alta calidad, capaz de responder mejor a las exigencias de la reforma educativa actual.
El Sr. Ngo Quoc Khanh, profesor de la escuela secundaria Trinh Phong (provincia de Khanh Hoa ), compartió: "Cuando nos enteramos de que la Asamblea Nacional había aprobado la Ley de Maestros, especialmente que los salarios de los maestros se ubicaban en el nivel más alto de la escala salarial administrativa, mi carrera, al igual que la de la mayoría de los maestros de la escuela, se llenó de alegría y felicidad porque el salario era suficiente para vivir".
Cuando el salario principal sea suficiente para cubrir los gastos diarios, los docentes se centrarán plenamente en invertir en el contenido de sus clases, haciéndolas más profundas y de mayor calidad; mejorando activamente sus métodos de enseñanza para lograr mejores resultados; prestando mayor atención a cada estudiante... Se espera que, al mejorar la calidad de las clases regulares, se eliminen gradualmente las clases de refuerzo y que los estudiantes ya no necesiten asistir a clases adicionales.
Además, la Ley de Docentes, que otorga autonomía a las instituciones educativas en la contratación y el uso del profesorado, ayudará al sector a resolver el problema actual de escasez de docentes a nivel local. Según estadísticas del Ministerio de Educación y Formación, al finalizar el primer semestre del ciclo escolar 2024-2025, el país aún presentaba un déficit de más de 120.000 docentes en los niveles de educación preescolar y general públicos. Sin embargo, todavía existen alrededor de 60.000 plazas asignadas que aún no han sido cubiertas.
Esta situación se debe a varios motivos. Por ejemplo, el plan de formación y contratación de docentes no está unificado ni es uniforme entre las escuelas de formación docente y cada localidad, lo que genera excedentes y escasez locales. Asimismo, el sector educativo aún no está autorizado para contratar docentes.
Cuando se faculta al sector educativo para reclutar y utilizar docentes, garantizando el principio de "donde hay estudiantes, debe haber maestros en el aula" de acuerdo con las realidades locales, no habrá desperdicio de recursos docentes ni situación de tener una nómina sin haber contratado personal.
Nguyen Van Luc
(Escuela secundaria Trinh Phong, Dien Khanh, Khanh Hoa)
Fuente: https://thanhnien.vn/luat-nha-giao-khong-chi-ghi-nhan-ve-thu-nhap-ma-con-la-trach-nhiem-185250617162755224.htm






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