Rusia lanza un nuevo sistema de radar para contrarrestar los vehículos aéreos no tripulados ucranianos desde una distancia de hasta 80 km.

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El equipo es el resultado de los esfuerzos para mejorar las capacidades de detección y defensa de largo alcance después de que Moscú vio un número creciente de ataques con drones desde Kiev.

El SKVP se probó entre 2021 y 2023, según informó la agencia de noticias TASS. Se presentó por primera vez en la exposición militar Army 2022, lo que sugiere que se trata de un radar desarrollado para abordar el conflicto en curso y se considera que tiene potencial de exportación.

Aumento de los ataques con vehículos aéreos no tripulados en territorio ruso

El último ataque involucró a dos drones que fueron derribados cerca de la aldea de Lukino, a las afueras de Moscú, cuando se aproximaban a un depósito militar local. Associated Press informó que se encontraron restos de un tercer dron a unos 20 kilómetros (12 millas) de distancia, sin que se reportaran daños ni víctimas.

El Ministerio de Defensa ruso (RuMoD) afirmó que los tres drones fueron derribados mediante interferencias electrónicas. Ucrania, que no suele confirmar ataques en territorio ruso, no hizo comentarios sobre el incidente.

El modelo UAV UJ-22 utilizado por Ucrania en un ataque a territorio ruso.

Anteriormente, según EurAsian Times, el 30 de mayo, Moscú y sus alrededores fueron atacados por al menos ocho drones, pero solo se causaron daños menores a algunos edificios. A principios de junio, los medios ucranianos difundieron imágenes de un nuevo UAV, llamado Beaver, que supuestamente participó en estos ataques aéreos.

El Ministerio de Defensa ruso (RuMoD) informó que todos los UAV fueron destruidos, tres de ellos "destruidos por guerra electrónica", lo que provocó que perdieran el control y se desviaran de su objetivo. El sistema de defensa aérea de corto alcance Pantsir-S derribó los cinco restantes.

Anteriormente, del 23 al 24 de abril, entre 4 y 5 vehículos aéreos no tripulados sobrevolaron la región de Bélgorod, cerca de Moscú, pero fueron derribados por guerra electrónica o por falta de combustible. Posteriormente, un dron UJ-22 de origen ucraniano fue encontrado volcado cerca de Noguinsk.

Pero el ataque más grave y alarmante fue el del Kremlin el 3 de mayo. Vídeos mostraron dos drones volando directamente hacia el edificio antes de ser derribados. Aunque no se creía que el presidente Vladimir Putin estuviera en el edificio en ese momento, Moscú lo calificó de intento de asesinato y culpó a Ucrania.

Reducir la presión, aumentar la eficiencia de la defensa

El 25 de mayo, el New York Times citó a funcionarios de inteligencia estadounidenses diciendo que la agencia de seguridad de Ucrania probablemente estaba detrás del ataque y que el incidente tenía más como objetivo demostrar la capacidad de superar el sistema de defensa aérea de Rusia que intentar realmente asesinar.

Sistema anti-UAV de Rafael Advanced Systems

La agencia de noticias TASS afirmó que el SKVP es capaz de detectar objetos voladores a una distancia de entre 400 m y 80 km. Por ejemplo, las aeronaves pequeñas pueden ser detectadas por radar a una distancia de 30 km, mientras que los drones medianos, como el Orlan-10, pueden detectarse a una distancia de 18 km, y los UAV más pequeños, a una distancia de 7 km. La velocidad ideal de detección es de 270 m/s.

El equipo ayudaría a aliviar la presión sobre los radares militares y los sistemas de guerra electrónica que actualmente protegen los cielos de Moscú, y "arruinaría" los planes de Kiev de usar ataques con vehículos aéreos no tripulados para presionar a Rusia a retirar sus defensas aéreas de la línea del frente para proteger ciudades clave.

El sistema SKVP completo consta de 24 unidades que forman una red. Cada unidad está equipada con estaciones de radar de matriz en fase montadas en trípodes, vehículos móviles o techos de edificios de gran altura. Puede rastrear simultáneamente 20 aeronaves, incluyendo pequeños drones, con la capacidad de clasificar, determinar la altitud y la distancia al objetivo. Esto significa que el sistema es capaz de rastrear un enjambre de UAV.

Los observadores militares occidentales asumen que el SKVP está diseñado para integrarse fácilmente con sistemas de defensa aérea de corto alcance como el Pantsir-S y complejos combinados de artillería y misiles para proteger a Moscú.

(Según EurAsian Times)

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