10 efectos nocivos para la salud de vivir en un entorno desordenado

¿Vives en un espacio lleno de cosas y desorden? La mayoría de nosotros consideramos el desorden solo un problema estético o una pequeña incomodidad.

Sin embargo, las investigaciones científicas en este campo han mostrado una tendencia preocupante: el desorden en el hogar puede tener efectos negativos más profundos y multifacéticos en nuestra salud física, salud mental y felicidad de lo que creemos.

1. Aumento de los niveles de estrés

Investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA, EE.UU.) descubrieron un vínculo claro entre la densidad de muebles en el hogar y niveles más altos de la hormona del estrés cortisol.

Según Psychology Today, el desorden sobrecarga el cerebro con demasiada estimulación, crea una sensación de trabajo inacabado y causa ansiedad y frustración al no encontrar lo necesario. Todos estos factores aumentan el estrés, cansando el cuerpo desde el comienzo del día.

2. Desencadena síntomas físicos relacionados con el estrés.

El estrés causado por el desorden no solo afecta la mente, sino que también tiene un impacto directo en el cuerpo. Desde respiración acelerada, aumento de la presión arterial, empeoramiento del asma y enfisema, hasta acidez estomacal, reflujo ácido, dolores musculares y de cabeza… todo puede ser causado por un entorno de vida desordenado.

Como en la actualidad el hogar estadounidense promedio contiene hasta 300.000 artículos, no sorprende que el New York Times haya llamado a los estadounidenses modernos la generación más estresada de todos los tiempos.

3. Capacidad reducida para concentrarse

Una investigación realizada en Princeton demuestra que un entorno visualmente desordenado tiene los mismos efectos neurológicos que sentirse abrumado por el ruido. Esto reduce la capacidad de concentración, lo que dificulta realizar el trabajo eficazmente.

4. Alimentación descontrolada

Una cocina desordenada puede llevar a comer en exceso. Un estudio de 2016 realizado por Brian Wansink, de la Universidad de Cornell, reveló que las mujeres que vivían en cocinas desordenadas consumían el doble de calorías provenientes de galletas que las que vivían en cocinas ordenadas. Nuestro entorno tiene una poderosa influencia en nuestros hábitos alimenticios diarios que a menudo pasamos por alto.

5. Formar hábitos poco saludables

Una investigación publicada en la Revista de Ciencias Psicológicas de la Universidad de Minnesota confirmó que un entorno organizado propicia comportamientos más deseables y positivos, como la generosidad. Por el contrario, cuando nuestro entorno físico está desordenado, afecta negativamente nuestros hábitos y comportamientos.

El desorden puede hacernos posponer el ejercicio, comer de forma menos saludable y dificultar el mantenimiento de otros hábitos positivos.

6. Reducción de la calidad del aire

El desorden dificulta la limpieza del hogar, creando un caldo de cultivo para el polvo, el moho y otros alérgenos. WebMD advierte que esto aumenta el riesgo de asma y alergias, especialmente en niños pequeños y personas con antecedentes de problemas respiratorios.

7. Disminución del aprendizaje y la productividad

Una investigación de la Universidad Carnegie Mellon reveló que los niños en aulas ordenadas obtuvieron un 13 % más de calificaciones en los exámenes que los niños en aulas desordenadas. Un ambiente ordenado ayuda tanto a niños como a adultos en casa a concentrarse y aprender con mayor eficacia.

8. Mala calidad del sueño

Un dormitorio desordenado puede causar dificultad para conciliar el sueño, interrupciones del sueño y una disminución de la calidad general del mismo. Cuando el dormitorio es un espacio desordenado, el cerebro tiende a activar un estado de alerta, lo que dificulta conciliar el sueño y aumenta la probabilidad de sufrir trastornos del sueño por la noche. Dormir mal puede provocar diversos problemas de salud durante el día.

9. Baja autoestima

El desorden suele provocar pensamientos negativos, sentimientos de depresión y autocrítica. Investigaciones de la Universidad de Nuevo México han demostrado que esto tiene un impacto negativo en la salud mental y en los sentimientos subjetivos sobre uno mismo.

Sentirse impotente para controlar el propio entorno puede conducir a una menor autoestima y a sentimientos de fracaso.

10. Impacto integral en la salud y la felicidad

El desorden es más que una simple molestia temporal. Crea un círculo vicioso: genera estrés, lo que a su vez genera malos hábitos (comer en exceso, dormir mal) y, por consiguiente, mala salud física. Mantener la casa limpia y ordenada no se trata solo de impresionar, sino de crear un ambiente donde todos los miembros de la familia tengan las mejores posibilidades de prosperar y estar sanos.

(Vietnam+)

Fuente: https://www.vietnamplus.vn/10-tac-dong-gay-hai-suc-khoe-khi-song-trong-moi-truong-bua-bon-post1080604.vnp